La nueva generación de vacunas se dirige tanto a la cepa original del SARS-CoV-2 como a las subvariantes BA.4 y BA.5 de ómicron.

Este miércoles, la Administración de Fármacos y Alimentos, conocida por sus siglas en inglés FDA, aprobó las nuevas vacunas de refuerzo de Moderna y BioNTech/Pfizer en Estados Unidos contra el COVID.

Dichas inoculaciones están adaptadas a la variante ómicron y sus subvariantes, lo que permitirá que las personas puedan vacunarse con una nueva dosis a partir de la próxima semana.

Estas nuevas dosis de refuerzos fueron autorizadas para personas a partir de los 12 años, en el caso de BioNTech, y los 18 para Moderna. Así, la nueva generación de vacunas se dirige tanto a la cepa original del SARS-CoV-2 como a las subvariantes BA.4 y BA.5 de ómicron.

De acuerdo a la FDA, estas vacunas permiten “brindar una mayor protección contra la variante ómicron que circula actualmente”. Con esto, la autoridad sanitaria se prepara para el inminente aumento de casos en el inicio del otoño e invierno boreal, es decir, a mediados de septiembre.

La dosis de refuerzo se podrá administrar a todos quienes lleven más de dos meses con la vacuna o bien, con un refuerzo anterior. Aun así, las formulas todavía no han sido recomendadas por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), la principal agencia de salud pública estadounidense, que discutirá el tema el jueves.

Las nuevas vacunas contra el COVID podrían llegar a Europa

Las compañías a cargo de desarrollar las vacunas bivalentes ya presentaron una solicitud de autorización para llevar la nueva versión de la dosis a la Agencia Europea de Medicamentos (EMA), según consignó Deutsche Welle.

Cabe destacar que en la actualidad, las vacunas que se entregan a la comunidad estaban diseñadas para proteger de la cepa inicial del virus, que fue reportado por primera vez a fines de 2019 en Wuhan, China.

Sin embargo, y debido a las múltiples variantes por la rápida evolución del virus, la fórmula muestra una eficacia menor.