Sus huellas dactilares lo delataron: emiten alerta con la identidad real del sicario prófugo

Carabineros y la PDI emitieron una nueva alerta internacional de “se busca” por el sicario venezolano que fue liberado de forma irregular, esta vez con su nombre real.

Hasta ahora, el acusado de asesinar al empresario denominado como “Rey de Meiggs” estaba identificado como Osmar Ferrer. Con dicha identidad fue arrestado, puesto en prisión preventiva y luego liberado.

Sin embargo, la mañana de este viernes se emitió una nueva alerta de búsqueda, esta vez con el nombre Alberto Carlos Mejía Hernández.

Se trata de la real identidad del sicario, quien entregó un nombre distinto a la justicia chilena a la hora de ser detenido.

De hecho, en la nueva alerta de búsqueda aparece “Osmar Alexander Ferrer Ramírez” como su alias.

Mejía Hernández, de 18 años, ingresó de forma irregular al país, por lo cual nunca hubo una confirmación real sobre cuál era su nombre.

Vale la pena mencionar que, en un primer momento, la ficha emitida por Carabineros habló de Carlos Alberto Mejía. Sin embargo, se trataba de un nuevo error, ya que Fiscalía y el ministro Luis Cordero confirmaron que en realidad era Alberto Carlos Mejía.

Mira la nueva alerta

Osmar Ferrer, su nombre social en Chile

Mejía no solo engañó al sistema judicial. Según informó Carabineros, cuando el OS9 detuvo al sicario se pudo establecer bajo diversas fuentes que Osmar Ferrer era su supuesto nombre.

El organismo policial realizó varias diligencias para establecer su identidad, debido a que ingresó de forma irregular al país.

Fue así como se pudo establecer que él se identificaba socialmente como Osmar Alexander Ferrer Ramírez. Así lo dieron a conocer personas que lo conocían, incluso en la conserjería del edificio donde vivía.

Sin embargo, nada de esto era real. Con sus huellas dactilares, Interpol pudo reconocer cuál era su verdadera identidad.

Polémica liberación

Lo ocurrido con Alberto Carlos Mejía, quien tendría vínculos con el Tren de Aragua, causó un terremoto en el sistema judicial chileno, luego que fuera liberado sin que la justicia hubiese determinado sacarlo de la cárcel.

Todo nace con el homicidio de José Felipe Reyes Ossa, empresario de Meiggs asesinado a disparos el pasado 19 de junio, a plena luz del día en Ñuñoa.

Carabineros logró detener a tres venezolanos por este caso, los que habrían recibido un pago para quitarle la vida al denominado “Rey de Meiggs”.

Tras su formalización el 9 de julio, todos quedaron en prisión preventiva. Sin embargo, Mejía fue liberado al día siguiente por una cadena de hechos que, hasta ahora, no se ha determinado si fueron errores o un acto deliberado.

Tres documentos en 11 minutos

Según explicó el Poder Judicial, la jueza Irene Rodríguez, del Octavo Juzgado de Garantía de Santiago, firmó la resolución de prisión preventiva a las 20:17 del 9 de julio.

Irónicamente, dicho documento tenía un error en el nombre que había dado el imputado, por lo que a las 20:25 se emitió un documento que anulaba la determinación y se realizó uno nuevo a las 20:28, que rectificaba la prisión preventiva, pero con el nombre que la justicia creía correcto.

Por motivos que aún no están establecidos, Gendarmería se quedó con la resolución que anulaba la medida cautelar, liberando a Ferrer a las 20:40 del 10 de julio. Esto pese a que, según el Poder Judicial, a las 14:13 de ese mismo día se informó por correo electrónico a Gendarmería que el individuo debía seguir tras las rejas.

El fiscal regional Occidente, Marcos Pastén, trabaja junto a la PDI para determinar si lo ocurrido fue un error o si hay personas que actuaron de forma deliberada para provocar la libertad de Alberto Carlos Mejía.