Un matrimonio denunció a un pastor evangélico de Bajo de Mena, en Puente Alto, de adeudar $10 millones en servicio de agua, luz y arriendo.

Se trata de José Salgado, pastor de Villa El Volcán, que se hizo conocido luego de realizar cultos religiosos, incluido un matrimonio, pese a estar contagiado de covid-19, lo que derivó en que la Fiscalía Metropolitana Sur iniciara una investigación por el eventual delito de incumplimiento de la cuarentena.

Los afectados acusaron en Contigo en la mañana de CHV que el hombre acumula boletas impagas hace 10 años, luego que firmaran un contrato de arriendo el 10 de marzo de 2010.

Según acusaron de agua tendría un saldo pendiente de más de 4 millones por 103 boletas y de luz más de 5 millones.

Todo habría comenzando cuando el hermano de Héctor Carillanca realizó hace 10 años un contrato de arriendo con el pastor de un departamento por un valor de 45 mil pesos, el que actualmente subió a 55 mil pesos.

Sin embargo, hasta el momento, lo único que ha cancelado con los $55 mil mensuales, sin asumir el resto de las cuentas, como el agua y la luz.

De igual forma, indican que se “apropió del patio común del edificio donde instaló la iglesia”. Construcción que no acordó con los dueños del departamento arrendado. “Yo no sé a quién le pidieron autorización para poner la iglesia que tiene personalidad jurídica”, agregó la esposa del afectado.

“Todos los meses tiene un consumo de hasta 140 mil pesos y debe ser porque tiene maquinaria dentro de la iglesia, tiene sobadora de masa, tiene revolvedora, porque hace pan para vender”, aseguró.

Afirman que pese a los reiterados intentos de contactar tanto al pastor como a su esposa, no han recibido una respuesta y que la última noticia que recibieron del matrimonio es que la municipalidad los ayudaría a saldar la deuda.

Otro situación que preocupa a los arrendatarios, es que el pastor ocupa las redes sociales para pedir a sus fieles que depositen dinero a una cuenta de ahorro para subsanar la millonaria deuda.

De acuerdo a lo informado por las compañías de agua y luz es que el corte no se concreta porque la zona es identificada como roja, es decir, peligrosa para el personal que mide el estado de los servicios.

Los afectados continúan a la espera de que el pastor Salgado sea desalojado del inmueble y regularice la deuda.