La Seremi de Salud de la región Metropolitana llegó hasta las dependencias de la sucursal de la Piccola Italia ubicada en Amunátegui -centro de Santiago- para realizar una fiscalización.

La revisión se inició luego de haber recibido denuncias de reciclaje de alimentos y maltrato hacia los trabajadores, por lo que la fiscalización se enfocó en las condiciones laborales y de inocuidad alimentaria.

Tras esta nueva fiscalización, la seremi abrió un sumario sanitario al local ubicado en Amunátegui por una serie de irregularidades detectadas que deberán ser solucionadas a la brevedad.

La seremi Rosa Oyarce explicó que el local “tenía problemas en los pisos y deficiencias en los baños de los trabajadores. En la cocina encontramos altas temperaturas, donde los trabajadores deben cumplir sus tareas (…) En cuanto a la inocuidad alimentaria, encontramos materias primas sin rotular y sin informar las fechas de elaboración, vencimiento y trazabilidad”.

En esta fiscalización, la autoridad no pudo constatar la denuncia de reciclaje de alimentos, pero aseguró que se vigilarán todos los restaurantes de la cadena con inspecciones sorpresa de inocuidad alimentaria y condiciones laborales.

Este corresponde al quinto sumario que abre la autoridad sanitaria a la cadena en 2019. Los procesos administrativos anteriores constataron deficiencias similares en otros locales, donde también había problemas de mantención en pisos y muros, además de malas condiciones laborales.

La multa del sumario sanitario puede fluctuar entre las 0,1 a 1000 UTM (máximo unos 40 millones de pesos), luego de dictada la sentencia.