Cerca de un centenar de personas, en su gran mayoría migrantes, marcharon desde la Plaza de Armas hasta el frontis de la Universidad de Chile, en plena Alameda, para manifestarse de forma pacífica en contra las políticas migratorias del Gobierno.

Dentro de las consignas por las que se movilizaron, estaba la demanda por una mejora sustancial en el sistema de regularización migratoria, el que fue extendido por 90 días.

El presidente de la Coordinadora Nacional de Migrantes, Rodolfo Noriega, responsabilizó al director del Departamento de Extranjería y Migración, Álvaro Bellolio, por la situación migratoria.

Por su parte, Álvaro Bellolio responsabilizó tanto a los empleadores como a los migrantes por las consecuencias que tiene el trabajo irregular.

Eduardo Cardoza, secretario Ejecutivo de la Organización Acción Migrar, destacó el aporte económico de la población migrante en Chile.

Los participantes de la marcha exigieron, también, que se regularice la situación de expulsión de migrantes que tienen familiares chilenos, además de la situación fronteriza en el paso Chacalluta.