Cuatro días cumplió el bloqueo de los accesos a la Refinería Enap Bío Bío, por parte de trabajadores subcontratados que piden mejoras en sus condiciones laborales. No solo la planta de Hualpén detuvo sus operaciones, también debió hacerlo el Terminal Marítimo de San Vicente.

Fracasó la mediación a la que fueron invitadas las partes por la Dirección del Trabajo, para intentar terminar con el bloqueo de la planta de Enap, ubicada en la comuna de Hualpén.

La estatal dijo estar dispuesta a conversar en torno a los acuerdos marco vigentes firmados hace un año.

No obstante, solamente una vez concluido el proceso de mantención mayor de la refinería y si los accesos a las instalaciones se desbloquean de inmediato.

Trabajadores emplazaron al gobierno central

Por su parte, la Federación de Trabajadores Subcontratistas, insistió en un petitorio que va más allá de esas condiciones.

Al respecto, el vocero Carlos Contreras llamó al gobierno central a escucharlos.

La Refinería Bío Bío detuvo el lunes sus operaciones, producto del bloqueo de los contratistas.

Asimismo, el miércoles el Terminal Marítimo San Vicente hizo lo propio con sus procesos de carga y descarga de naves, dada la imposibilidad de llevar a cabo un normal desarrollo de sus actividades.

Ante este escenario, el gobernador regional del Bío Bío, Rodrigo Díaz, llamó a la reflexión y responsabilidad de quienes dirigen el movimiento.

En esa línea, cuestionó el momento en que se realiza esta toma de accesos.

El movimiento, sin embargo, ha recibido la solidaridad de diversos sectores políticos de la zona.

Tanto la diputada del Partido Comunista, Candelaria Acevedo, como el UDI, Sergio Bobadilla, solidarizaron con los movilizados.

Enap reiteró advertencia por desabastecimiento de combustible

En su último comunicado, la empresa dijo que, de mantenerse por más horas esta situación de bloqueo, resulta riesgosa para el abastecimiento de combustible y kerosene doméstico para calefacción en la región del Bío Bío y la zona sur del país.

Por esto, han mantenido el diálogo con autoridades regionales y nacionales, dándoles a conocer la gravedad de la situación y necesidad urgente de que se tomen medidas para solucionar el conflicto.