Un hombre condenado por homicidio que permanecía en el Centro de Estudio y Trabajo de Cañete, región del Bío Bío, es acusado de asesinar a otro interno y darse a la fuga.

Los familiares del interno asesinado en el centro penitenciario criticaron duramente a Gendarmería.

Acusan que el joven fue apuñalado mientras hablaba por teléfono con su madre y no en una riña como informó el organismo penitenciario. Además, cuestionaron que el presunto autor estuviera en un recinto para reos no peligrosos.

Los hechos ocurrieron el 25 de enero, cuando Abraham Zambrano conversaba telefónicamente con su madre desde el CET de Cañete, donde cumplía una pena por robo.

“Merece justicia”

Su madre tiene los registros de esa llamada y escucha cuando, según la información recopilada después, su hijo es apuñalado de muerte.

Fueron otros internos quienes avisaron a la mujer sobre el fatal incidente y le confirmaron que el ataque fue mientras Abraham hablaba por teléfono.

“Ese mismo día se dio a la fuga y asesinó a mi hijo a sangre fría. Aunque mi haya sido un delincuente, era un ser humano”, se lamentó la mujer.

Sobre el caso, la Dirección Regional de Gendarmería confirmó la fuga de John Herrera Astorga tras el asesinato, el que ocurrió en el marco de una riña.

Sin embargo, el abogado de la familia, Moisés Vilches, sostuvo que esa versión es descartado no sólo por el registro de llamadas de su clienta sino también por un peritaje de la PDI, y de ahí la querella por homicidio presentada.

Otro cuestionamiento al organismo lo hizo el primo de Abraham, Alejandro Zambrano, sobre la presencia de John Herrera en el CET de Cañete y no en una cárcel. Esto, considerando su peligrosidad, como condenado a 10 años por un primer homicidio perpetrado el 2017 en Lota.

El crimen fue denunciado por Gendarmería al Ministerio Público e inició además un sumario interno para determinar responsabilidades por el hecho de sangre y la fuga de John Herrera.