Las autoridades de la provincia de San Antonio insisten en la necesidad de licitar a la brevedad las obras en la Ruta de la Fruta, solicitando al ministro de Obras Públicas, Juan Andrés Fontaine, dar celeridad al proceso, en el marco de la expansión del puerto sanantonino.
La gobernadora de esa provincia, Gabriela Alcalde, argumentó que la carretera es fundamental para que la ciudad no sufra atochamientos y se adapte a la cantidad de carga del megapuerto, que será construido en dicha comuna.
La también llamada ruta 66, une el puerto de San Antonio con la Ruta 5, a la altura de Pelequén, región de O’Higgins. El proyecto ya había sido licitado en dos ocasiones, la última de ellas en febrero 2017, cuando sólo se presentó un oferente, pese a que 13 empresas habían solicitado las bases para el proceso.
En este contexto, el alcalde de San Antonio, Omar Vera, también insistió en la necesidad de la ruta debido al aumento en el proceso productivo de la comuna y el gran número de camiones que circulan por la vía.
Además, el jefe comunal informó que las razones de recibir sólo un oferente en el proceso de licitación tienen que ver con el riesgo que significa la oposición de la comunidad de Pichidegua, lugar por donde pasa la carretera en la región de O’Higgins.
El ministro de Obras Públicas, Juan Andres Fontaine, aseguró que se revisó la situación general de la ruta y las dificultades para el acceso al puerto de San Antonio, y recién en julio el MOP recibirá las propuestas, para reanudar el proceso de licitación.
Este proyecto ya había sido puesto en concurso público en enero de 2010 y adjudicado por Consorcio Vial Chile, por 360 millones de dólares. Sin embargo, la concesión fue devuelta en el 2013, debido a problemas de sobrecosto.