El Tribunal Ambiental de Santiago dictaminó, por 2 votos contra 1, que el derrame de petróleo en la bahía de Quintero ocurrido en 2014 no generó un daño ambiental severo ni permanente en el tiempo en la zona, por lo que tras cuatro años de instancias judiciales, la demanda del municipio contra ENAP fue desestimada.

Priscilla Pacheco, de la organización Salvemos Quintero, recordó cuando el ahora exintendente Gabriel Aldoney le reconoció que ENAP no tenía protocolos de seguridad al momento del derrame, para ilustrar lo que -en su opinión- es un fallo inconsecuente de la instancia.

Sin embargo, sí se determinó instruir una medida cautelar -en el contexto de los tribunales ambientales- de realizar un análisis de riesgo de todas las actividades que se desarrollan en la bahía, según indica el fallo, en reconocimiento de la amenaza de los hidrocarburos en la zona.

ENAP tendrá 90 días hábiles para realizar el análisis de todas las actividades de descarga de combustibles, en un encargo que deberá ser aprobado por el Ministerio de Medio Ambiente.

La demanda por reparación de daño ambiental fue presentada por la Municipalidad de Quintero, solicitando al Tribunal que ordenara a Enap la reparación del daño ambiental de 38.700 litros de petróleo crudo desde el Buque Tanque Mimosa ocurrido en la madrugada del 24 de septiembre de 2014.