Según el ente persecutor, Torres Marchant integra una asociación criminal internacional que planificó y organizó el secuestro del empresario en Rancagua.
En prisión preventiva quedó el séptimo detenido e imputado por el secuestro extorsivo de un empresario en Rancagua, hecho ocurrido en noviembre de 2023.
El Juzgado de Garantía de Rancagua dejó a Jorkenedy Alberto Torres Marchant sujeto a la medida cautelar más gravosa, luego de que el Ministerio Público lo imputara como autor de los delitos consumados de secuestro agravado extorsivo, robo con intimidación y asociación criminal.
Recordemos que el pasado 8 de noviembre, Rudy Basualdo fue secuestrado por un grupo armado desde el interior de su empresa, ligada al rubro metalúrgico.
Posteriormente, los delincuentes huyeron hacia la comuna de San Fernando y, tras una persecución, Carabineros detuvo a tres de ellos. Luego, fueron trasladados hasta una comisaría en el sector de Rengo.
El hombre estuvo casi dos días retenido contra su voluntad hasta ser liberado el viernes 10 de noviembre. Todo esto, gracias a un millonario pago.
En la audiencia de formalización, el magistrado Gonzalo Celedón Bulnes ordenó el ingreso de Torres Marchant al Recinto Penitenciario Especial de Alta Seguridad de Santiago por considerar que la libertad del imputado constituye un peligro para la seguridad de la sociedad y la víctima.
Además, mantuvo el plazo de investigación de 180 días fijado el 10 de noviembre de 2023, en la audiencia de formalización de cargos contra los primeros imputados detenidos en la causa.
Al resolver la cautelar, el juez Celedón Bulnes sostuvo que el peligro para la seguridad de la sociedad de Torres Marchant se establece por estar “(…) presumida fundadamente la participación, tener tres causas en Valparaíso, actuar en grupo o pandilla, las penas asignadas a los delitos, la multiplicidad de ilícitos, las armas de fuego involucradas, amenazas de muerte y una serie de elementos que hace pensar en una organización criminal que maquina maliciosamente los hechos que pretende cometer. No es un delito que se cometa por casualidad”.
Según el ente persecutor, Torres Marchant integra una asociación criminal internacional que planificó y organizó el secuestro del empresario en Rancagua.
