La Superintendencia del Medio Ambiente confirmó un proceso sancionatorio en contra de la empresa sanitaria Essal, por incumplimientos y descargas de aguas servidas en el Lago Panguipulli.
El órgano fiscalizador detectó que Essal habría tenido incumplimientos ambientales en su proyecto de mejoramiento del sistema de alcantarillado, tratamiento y disposición final de aguas servidas en Panguipulli.
Según el organismo, la determinación la tomaron tras denuncias de la Capitanía de Puerto de Panguipulli, del municipio local y de vecinos.
Producto de fiscalizaciones en conjunto con la Armada detectaron que no se realizaron monitoreos de descargas en el estero Anueraque y que se vertieron aguas servidas al lago de Panguipiulli, de forma habitual y con una larga duración.
Eduardo Rodríguez, jefe regional de la Superintendencia del Medio Ambiente, aseguró que se tomaron muestras del agua del lago que confirman las denuncias.
Para la Superintendencia del Medio Ambiente, la primera falta, por no realizar monitoreos en la descarga del estero Anueraque, es una de carácter leve.
Pero la segunda, por realizar descargas habituales de aguas servidas al lago Panguipulli, es una de carácter gravísima, arriesgando la empresa a millonarias multas de hasta 10 mil Unidades Tributarias Anuales e incluso la clausura o la revocación de su Resolución de Calificación Ambiental (RCA).
Ahora la empresa Essal tiene 15 días para presentar sus descargos o dentro de 10 días informar de un plan de Cumplimiento y así -según el organismo fiscalizador medioambiental– la sanitaria podría enmendar los problemas detectados, realizar las inversiones necesarias y volver a cumplir la normativa vigente.
