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La Corte de Apelaciones de Valdivia confirmó la prisión preventiva del patrón de lancha implicado en el naufragio en Bahía Mansa que dejó siete personas fallecidas en la provincia de Osorno. El tribunal ratificó la medida cautelar tras imputar al acusado por siete delitos de homicidio y 24 delitos de lesiones menos graves, manteniendo la calificación jurídica de su participación en los hechos. La investigación reveló que la embarcación estaba sobrecargada y el acusado, con licencia vencida, hizo caso omiso a las condiciones adversas, lo que provocó la tragedia.

La Corte de Apelaciones de Valdivia confirmó la prisión preventiva del patrón de lancha que naufragó en Bahía Mansa, dejando siete personas fallecidas en la provincia de Osorno.

La resolución se adoptó en un fallo dividido por los integrantes de la Segunda Sala del tribunal de alzada, respecto al hombre identificado por la justicia con las iniciales R.A.P.C., imputado por siete delitos consumados de homicidio y 24 delitos de lesiones menos graves.

En la revisión de la medida cautelar tras el fatal naufragio del 26 de enero, se estableció que “atendido el mérito de los antecedentes, lo expuesto por los intervinientes en esta audiencia y estimando este Tribunal que se mantiene, por ahora, la calificación jurídica respecto de la participación del imputado en los hechos“.

Por tanto, se confirma lo resuelto en primera instancia por el Juzgado de Garantía de Osorno, que lo dejó en prisión preventiva durante el periodo de la investigación, que se fijó en 150 días.

Los hechos investigados

De acuerdo con la investigación desarrollada por el Ministerio Público, la empresa turista familiar del imputado fue contratada por un grupo familiar compuesto por 21 personas para ir desde Bahía Mansa hasta la caleta Cóndor abordo de la embarcación “Río Cholguaco”, cuya capacidad máxima era de 28 personas, con la tripulación incluida.

El 26 de enero, el imputado zarpó de Bahía Mansa en compañía de una menor de edad y no de un tripulante, con el objetivo de recoger al grupo familiar que contrató el servicio, pero en el viaje de regreso, el patrón de la embarcación se detuvo en dos localidades para subir a otros pasajeros, sumando en total 34 años.

Esta sobrecarga de la nave, sumado a las condiciones climáticas adversas, hicieron que la lancha perdiera estabilidad y el agua comenzara a ingresar a las instalaciones. Así, cuando los pasajeros exigieron al imputado contactar a la autoridad marítima, este los llamó a la calma y les aseguró que todo estaba bien. Es más, de acuerdo con la versión de los sobrevivientes, había pedido no contactar a equipos de emergencia.

Tras este trágico accidente se conoció que el acusado mantenía la licencia de patrón de lancha vencida y permiso de zarpe estaba al nombre de su padre, quien no realizó el servicio turístico esa jornada.