Desde el Servicio Nacional de Adulto Mayor y el Ministerio de Salud, han declarado como estable o controlado el brote de coronavirus que afectó a un hogar de ancianos en Ancud, donde una mujer murió al no ser vacunada.

Cerca de medio centenar de personas infectadas con el COVID-19, entre trabajadores y ancianos, dejó la situación catalogada como “la prueba de fuego” del proceso de inoculación en el país, ya que se dio poco después de que se inyectara la primera dosis en el recinto.

El brote afectó más fuertemente a quienes no fueron inmunizados, por lo que estas dos últimas semanas la contingencia de Ancud, región de Los Lagos, ha estado en la mira.

La rápida expansión del virus en el recinto dejó una víctima fatal, una mujer que debió permanecer internada en el hospital de la comuna, y dos aún con tratamiento, como explicó el coordinador regional del Senama en Los Lagos, Mauricio Aroca.

Las dos beneficiarias del Hogar San Vicente de Paul de Ancud que siguen estables pero en observación, están recibiendo tratamiento.

Alex Oyarzo, encargado del Programa Adulto Mayor de la Seremi de Salud, informó que más del 95% de los residentes ya están de alta.

La vacunación, como se ha dicho en otras oportunidades, no impide que las personas se contagien con el COVID-19, sino que evita que tenga un impacto que puede llegar incluso a cobrar la vida de los pacientes.