La familia de un hombre acusa negligencia de un centro de diálisis en Angol, por la muerte del paciente. Un informe de la Seremi de Salud arrojó una serie de irregularidades.

Por una presunta negligencia médica, una familia tomó diversas acciones legales tras la muerte de su padre que se dializaba hace 10 meses en Angol, región de La Araucanía.

La Seremi de Salud inició sumarios que presentaron irregularidades en el centro donde se atendía el usuario.

Se trató de Alberto Espinoza, de 67 años, quien debía acudir tres veces por semana hasta el Centro de Diálisis Bayo Dial en la comuna de Angol, producto de problemas de salud.

El 4 de marzo del año 2021 acudió como en los últimos 10 meses antes de aquella fecha para recibir su terapia de hemodiálisis. Lamentablemente, en medio del procedimiento sufrió un paro cardiorrespiratorio.

Si bien se informó que recibió atención, e incluso fue llevado hasta el hospital de la comuna, Alberto murió aquella jornada.

Tras lo ocurrido, su familia comenzó a hacer los trámites para comprender qué sucedió, por lo que su hija, Mirta Espinoza, solicitó las fichas médicas para estudiarlas. En ellas, encontró que su padre no había recibido de manera correcta un medicamento recetado para su anemia.

Aquella condición ya le había traído inconvenientes al hombre, ya que un día tras haberse atendido presentó una hemorragia, por lo que era algo de especial cuidado para su familia.

Ese fue uno de los gatillantes para que Mirta decidiera tomar acciones y así las entidades fiscalizadoras inspeccionaran lo ocurrido, solicitando tanto a la Superintendencia como a la Seremi de Salud en La Araucanía estos procesos.

Ella explicó que tampoco recibieron desde el centro un llamado de alerta respecto al retraso que estaba teniendo la entrega del medicamento, para haber buscado como familia otra opción.

Aquella situación le genera aún dudas de qué habría pasado con su padre en caso de haber recibido de manera oportuna la medicina.

Dentro de los procesos de inspección está el documento al que accedió la hija vía Transparencia, quien asegura que por parte de la cartera de Salud se constataron algunas irregularidades durante la visita.

Entre ellas, por ejemplo, está la ausencia de un médico para un cuarto turno desde noviembre de 2020, lo que según se indicó, “no asegura la calidad de atención, poniendo en riesgo la salud de los usuarios que, por su condición de pacientes crónicos, agregan un riesgo adicional”.

También se consideró que desde la estación de enfermería no todos los pacientes quedan a la vista, quedando cuatro usuarios fuera del rango visual.

Se constató además el quiebre de la cadena de frío para las medicinas, el equipamiento insuficiente para la atención de pacientes con urgencia cardiorrespiratoria, infracciones consideradas graves y que existieron hasta antes de la fiscalización.

Si bien el centro presentó sus reparos y también comentó que se habían subsanado los puntos mencionados, se determinó una multa de 50 Unidades Tributarias Mensuales, es decir, poco más de 2 millones de pesos.

Por el caso, la familia también acudió hasta la Fiscalía apuntado una presunta negligencia médica, por lo que hay una investigación en curso.

Todo lo anterior, explicó Mirta, si bien no cambiará lo ocurrido, sí permitiría que los pacientes que sigan atendiéndose lo puedan hacer bajo las condiciones y la calidad que amerita su salud.

Radio Bío Bío solicitó mayores antecedentes a la Seremi de Salud en La Araucanía, sin embargo, hasta el cierre de esta edición, no se obtuvieron. También se contactó al centro referido, pero por el proceso investigativo que está aún en curso, declinaron entregar declaraciones.