La Asociación de Consumidores y Usuarios del Sur, ingresó un recurso de protección en la Corte de Apelaciones de Temuco, en representación de al menos 180 familias que mantienen contrato con la Universidad Mayor y que reclaman por una mala prestación de servicio a los estudiantes en período de pandemia.
El abogado, Edgardo Lovera, quien patrocina la acción legal, detalló que tras diversas conversaciones con la Universidad Mayor, los apoderados que han resultado severamente afectados económicamente por la pandemia y cuyos hijos están matriculados en la casa de estudios superiores, no han logrado una respuesta satisfactoria a sus inquietudes por el servicio que están pagando.
A lo anterior, precisó el abogado, se suma que la Universidad tiene una interpretación del contrato suscrito con los apoderados, que a su juicio es arbitraria y unilateral.
Pierette Roure, quien se identificó como la sostenedora de su hija, quien es alumna de la Universidad, precisó que adoptaron esta decisión al no obtener una solución a sus inquietudes, a causa del impacto que la pandemia ha generado.
Daniel Díaz Romero, cuya hija cursa cuarto año de Terapia Ocupacional, precisó que la situación les afecta severamente, no solo en el ámbito económico como familia, sino que también anímica y psicologicamente, por un servicio que no es el contratado.
Consultada la sede Temuco de la Universidad Mayor, se precisó por medio de su unidad de comunicaciones que por el momento no se referirán al tema, sin perjuicio de que una vez que sean notificados o la acción legal avance, puedan entregar su versión de lo denunciado por algunos apoderados
