Un grupo de desconocidos atacó durante la madrugada del sábado las instalaciones de la Unidad de Medicina Nuclear del Hospital de Antofagasta, afectando modernos equipos oncológicos que permitirían reducir la lista de espera en el norte del país.

De acuerdo a lo informado por El Mercurio, en ese lugar funciona actualmente la Comisión de Medicina Preventiva e Invalidez (Compin), lo que pudo haber motivado el ingreso de los vándalos.

El hecho ocurrió cuando grupos de personas realizaban destrozos en el sector, incluyendo a la Basílica del Corazón de María que terminó con millonarios daños, detalla el mismo medio.

En el recinto médico vandalizado se guardaban costosas máquinas, una gammacámara y un densitómetro óseo, que se ocuparían a partir de abril en el futuro Centro Oncológico del Norte para diagnosticar y atender a pacientes entre las regiones de Arica y Coquimbo.

“Íbamos a abarcar toda la población del norte”, indicó al matutino el doctor David Guenchor, profesional de la Unidad de Medicina Nuclear del Hospital Regional de Antofagasta.

En ese recinto asistencial existen máquinas similares, no obstante la idea era tener dos puntos de atención con el fin de reducir al máximo la lista de espera de pacientes, que a inicios de noviembre alcanzaba los 250.

“Vamos a pasar un mes sin poder entrar a tratamiento a nuevas personas por cáncer”, afirmó a Canal 13 el ministro de Salud, Jaime Mañalich, cuando fue consultado por las consecuencias de lo ocurrido.

Por su parte, la doctora Alejandra Muñoz, jefa de la Unidad de Medicina Nuclear del hospital antofagastino, explicó al periódico que en caso que, definitivamente las máquinas afectadas no puedan volver a funcionar, el dinero perdido bordea los $450 millones, por lo que podría tomar hasta 2 años conseguir nuevamente el equipamiento.

Respecto a los responsables, el jefe de la Brigada Investigadora de Robos (BIRO) de la PDI en Antofagasta, subprefecto Iván Morales, aseguró que recibieron una denuncia por robo en lugar no habitado, pues algunas especies fueron sustraídas del recinto, aparentemente, para ser ocupadas como combustible de barricadas.

De momento, no hay personas detenidas por lo ocurrido, mientras que la madrugada de este martes el lugar fue nuevamente atacado, por lo que no se atenderá público durante la jornada.