Complejos días vive el diputado por La Araucanía, Mauricio Ojeda, debido a la arista Manicure del Caso Convenios, que lo tiene automarginado de la bancada de Republicanos, y en serio riesgo de ser enviado al Comité de Ética de la Cámara Baja.

Recordemos que en medio de la investigación que lleva a cabo la Fiscalía de Temuco, por el traspaso de más de $730 millones desde el Gobierno Regional a las fundaciones Folab y Educc, se detallaron transferencias que el parlamentario realizó como “préstamo” a su amiga y representante legal de una de las entidades: Rinett Ortiz.

De hecho, el Ministerio Público adelantó que solicitará el desafuero en su contra, por lo que se espera que formalizado.

Y por si fuera poco, un nuevo antecedente lo complicó en la causa, luego que un informe de la PDI detallara que un teléfono del parlamentario venía con daños en su pantalla y tarjeta electrónica.

Al respecto, su abogado afirmó que el hijo del parlamentario lo destruyó días antes que fuera entregado de forma voluntaria.

Asimismo, el próximo martes su caso será revisado de oficio por la Comisión de Ética de la Cámara, según confirmó la diputada socialista Ana María Bravo a La Segunda.

“Es algo muy delicado, que ya está en manos de la justicia (…). Tenemos que barajar las posibilidades (de acción). Los hechos que están siendo investigados ya revisten carácter de delito”, aseguró.

Según fuentes de BioBioChile, Ojeda se automarginó de la bancada de Republicanos el año pasado, hace varios meses, por lo que no participa en las reuniones o almuerzos del comité.

De todas maneras, aún no se concreta su salida de manera administrativa, por lo que aún figura como integrante de la bancada en la página web de la Cámara.

Por lo mismo, existe incomodidad entre los republicanos, especialmente por los cuestionamientos por la ausencia de Mauricio Ojeda en la sesión donde se votó la mesa directiva de la Cámara.