El pasado miércoles la ministra Karla Rubilar recibió un WhatsApp donde se le comunicaba que todos los ministros, del Interior, Vocero, Segpres, Hacienda y Desarrollo Social —su ministerio— enviarían una carta a los medios de comunicación manifestando su adherencia a la decisión del presidente Sebastián Piñera de recurrir al Tribunal Constitucional por el tercer retiro, texto en el que también se pretendía desmentir rumores de disidencia al interior del Gobierno.

Según se señaló, a Rubilar le molestó la señal que se daba al enviar dicho texto, pues habría ido dirigido a ordenarla a ella, que viene solicitando otra actitud del Ejecutivo ante la crisis sanitaria. La personera de Desarrollo Social piensa que lo entregado hasta ahora por el Gobierno, en medio de la crisis, no es suficiente, según recogió La Segunda.

Las mismas fuentes especulan que Rubilar está molesta, que renunciaría, puesto que además había suspendido actividades públicas, sin embargo, este jueves participó junto a la asesora especial indígena, Ana Millanao, del Foro Permanente de las Naciones Unidas para cuestiones indígenas, instancia donde se abordó la participación de los pueblos originarios en el proceso constituyente.

Según indica el medio, una versión cuenta que la ministra le dio un ultimátum a Piñera, mientras que otra sostiene que habría sido una conversación a “corazón abierto”.

En dicha conversación le habría dicho a Piñera que tanto su afecto como lealtad hacia él siguen en pie, pero que su prioridad era la ciudanía. Además, le habría dicho que se tenían que entregar beneficios realmente universales, solicitud que sería fundamental para la permanencia de Rubilar en la cartera y en el Gobierno.

Asimismo, señalan que Rubilar no lo ha pasado muy bien durante los últimos meses. Mencionan que ha perdido peso y que trabaja extensas jornadas, las que le implican comer a deshoras.

La ministra discrepante

De igual forma, se sostiene que Rubilar es la única dentro de las reuniones de Comité Político que discute las posturas del Mandatario, lo que la habría llevado a no encajar dentro del grupo.

Además, se sostiene que la personera de Desarrollo Social siente que al grupo de colaboradores del Presidente, que se ha ido conformando, no le interesa disentir de las ideas de Piñera.