El Mineduc, a través del Servicio de Información de Educación (SIES), informó que durante el 2017 fueron 29.312 los extranjeros que formaron parte de las instituciones de Educación Superior chilenas.

De dicho total, cerca de 9 mil realizaban un intercambio, siendo 20.150 quienes estudiaban de manera regular en un programa completo.

La mayoría de estos últimos, estudia en busca de un título profesional o una especialización en universidades (62%), y más de la mitad lo hace en la región Metropolitana o en la de Antofagasta.

Juan Eduardo Vargas, jefe de Educación Superior (Divesup), indicó a Emol que el aumento de 3,6% de foráneos matriculados entre 2014 y 2017, se debería a “la destacada ubicación que tienen varias instituciones chilenas en los rankings regionales”.

El perfil del estudiante extranjero

El 90 de los estudiantes que vienen a Chile desde otro país, lo hacen provenientes de otras regiones de Latinoamérica y el Caribe. Sólo un 3,2% viene desde algún país europeo.

El estudiante foráneo prefiere carreras humanistas, ligadas a las ciencias sociales y al derecho, luego la segunda preferencia son las ingenierías.

Un cuarto de quienes cursan pregrado cuentan con algún beneficio estatal.

Respecto de la residencia previa del extranjero que viene a estudiar al país, ha disminuido el número de quienes la tienen. En 2014 eran más de 5 mil y el año pasado la cifra sólo alcanzó los 3 mil.

A pesar de todos estos número, Ernesto Treviño, director del Centro para la Transformación Educativa (Centre) de la U. Católica, dijo al citado medio que “la cifra es relativamente baja si se considera el potencial que tendría Chile para atraer estudiantes extranjeros”.

Conforme el experto, Chile tiene “un potencial muy grande que no ha sido explotado: (el presentarse) como planteles de alta reputación y un contexto de tranquilidad que puede atraer a estudiantes de América latina”.