Al cierre de esta edición se habla de 13 muertos y 21 heridos. Lo que sí se confirmó es que el atacante se suicidó. En los cargadores de las pistolas el tirador tenía escrita la palabra "odio", con tinta roja.
Al menos trece muertos, siete de los cuales eran menores de edad, deja al cierre de esta edición un tiroteo en una escuela de Izhevsk, ceca de los Montes Urales, en Rusia, de acuerdo al Comité de Instrucción nacional.
Al mismo tiempo, otros siete adultos y 14 menores terminaron heridos.
Previamente el Comité de Instrucción había informado de al menos nueve fallecidos y varios heridos a raíz del suceso.
El jefe de la capital de la república rusa de Udmurtia, Alexandr Brechálov, escribió previamente en Telegram que había ocurrido “una tragedia en Izhevsk, en la escuela número 88”.
“Una persona no identificada entró en la escuela, mató a un guardia. Hay víctimas entre niños y heridos”, dijo.
Brechálov, quien acudió inmediatamente al lugar del suceso, afirmó que el tirador suicidó.
Aquello lo confirmó también el Ministerio del Interior de la república rusa, quien informó del hallazgo del cuerpo del atacante.
Posteriormente se supo que en el ataque habían fallecido dos guardias del colegio y al menos dos profesores.
El atacante, según las autoridades, estaba armado con dos pistolas reconvertidas para disparar con munición letal.
En los cargadores de la pistola, cuyas imágenes fueron difundidas en los medios, se puede leer la palabra “odio”, escrita con tinta roja.
Udmurtia declaró luto por las víctimas del ataque a la escuela que se prolongará hasta el 29 de septiembre.
En la escuela 88 de Izhevsk, ubicada a pocos metros de la administración de la ciudad, estudian cerca de mil alumnos, según medios rusos.
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