La policía francesa detuvo a un joven de 19 años acusado de torturar y asesinar a un sacerdote que presuntamente abusó de él y de su padre.

El hecho se remonta al 4 de noviembre en la localidad gala de Agnetz, al norte del país, cuando el acusado habría tomado un crucifijo para enterrarlo en la garganta a Roger Matassoli, religioso de 91 años de edad, reporta el medio español La Vanguardia.

“Alexander (el detenido, cuyo nombre completo no ha sido revelado), que trabajaba en la casa del sacerdote ayudándole con las tareas de limpieza, fue detenido el mismo día intentado huir con el coche del fallecido”, consigna el citado artículo.

Tras su arresto, el joven fue acusado de tortura, asesinato y resistencia contra la autoridad, mientras que el hecho es indagado como “un acto de venganza”.

“El cura había sido acusado de abusar sexualmente de al menos cuatro niños, entre ellos el joven de 19 años y su padre”, recoge La Vanguardia.

Pese a las denuncias por pedofilia, el sacerdote se mantuvo en la iglesia y solamente fue trasladado tres veces de diócesis.