El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, expresó su “profunda preocupación” por la toma por parte de Rusia de tres buques militares ucranianos, dijo el miércoles la Casa Blanca, un día después de que el mandatario amenazara con cancelar una cita con su homólogo ruso.

Durante una llamada telefónica entre Trump y el presidente turco Recep Tayyip Erdogan, “los dos líderes expresaron su profunda preocupación por el incidente en el estrecho de Kerch y la continuada detención de los buques y miembros de la tripulación de Ucrania”, dijo la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders.

Tres navíos de la Marina ucraniana fueron capturados por guardacostas rusos en el mar Negro, el domingo frente a las costas de Crimea, una región ucraniana anexada por Moscú en 2014.

El incidente centró la atención internacional en el prolongado conflicto en Ucrania, una antigua república soviética donde Rusia ha apoyado a los insurgentes en el este y ha tomado el control completo de la península de Crimea en el sur.

Trump dijo el martes que, como resultado de la crisis, está reconsiderando la reunión bilateral prevista con el presidente ruso, Vladimir Putin, al margen de la cumbre del G20 en Buenos Aires, Argentina, a fines de esta semana.

La Casa Blanca aseguró que Trump y Erdogan discutirán por su parte el tema en una cita prevista durante el G20.

Mientras tanto, Putin defendió el miércoles la acción de las fuerzas rusas, señalando que cumplieron con su deber al capturar los barcos, y acusó a los ucranianos de haber organizado una “provocación”.

El presidente de Ucrania, Petro Poroshenko, afirma que el Kremlin se prepara para una “guerra a gran escala”.

Los gobiernos occidentales han apoyado a Kiev, acusando a Moscú de bloquear ilegalmente el acceso al Mar de Azov, crucial para las exportaciones de cereales y acero producidos en el este de Ucrania, y de hacer uso de la fuerza sin justificación.