La psiquiatra desarrolló un importante trabajo de terapia ocupacional, especialmente con artes y pintura, en la llamada Casa de las Palmeras, una institución que fundó en 1956 en Río de Janeiro y que alcanzó gran reconocimiento internacional.

El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, vetó este miércoles el proyecto de ley por el que el Congreso aprobó la inclusión del nombre de la psiquiatra Nise da Silveira, una pionera en los tratamientos humanizados para enfermos mentales, en el “Libro de los Héroes y Heroínas de la Patria”.

El mandatario alegó que el reconocimiento de la especialista revolucionaria en los tratamientos psiquiátricos como heroína “contraría el interés público”. Esto, según la justificativa al veto publicado hoy en el Diario Oficial.

El proyecto de ley que prevé la inscripción de Silveira en el emblemático libro fue una iniciativa de la diputada Jandira Feghali, líder del Partido Comunista do Brasil (PCdoB). Además, se aprobó en el Senado en última instancia el 24 de abril pasado.

El jefe de Estado es un capitán de la reserva del Ejército, defensor de la dictadura brasileña, declarado anticomunista y con conocidas posiciones contra la ciencia.

Lo anterior, incluyendo el rechazo a las vacunas, quien alegó en su veto que las realizaciones de la psiquiatra no se enmarcan en los criterios previstos.

Nueva polémica del presidente Jair Bolsonaro

De acuerdo con el gobernante, en el llamado “Libro de los Héroes y Heroínas de la Patria” tan solo se puede registrar.

Lo anterior, de “forma perpetua el nombre de los brasileños y brasileñas que han ofrecido la vida por la Patria, para su defensa y construcción, con excepcional dedicación y heroísmo”.

Según Bolsonaro, “no es posible evaluar, en los moldes de la referida ley, la envergadura de los hechos de la médica Nise Magalhaes da Silveira. Esto, ni el impacto de éstos en el desarrollo de la Nación, a pesar de sus contribuciones al área de la terapia ocupacional”.

Silveira (1905-1999), discípula de Carl Gustav Yung, fue una pionera en la defensa de los tratamientos humanizados. Estos, para pacientes con trastornos mentales en la década de 1940.

Esto, cuando eran comunes en la época métodos hoy cuestionados y hasta prohibidos como el electrochoque, la lobotomía, la insulinoterapia y el total confinamiento en hospicios.