Nuevas acusaciones investiga la policía en contra del comediante Russell Brand, denunciado por abusos sexuales y violación.

Nuevas acusaciones investiga la Policía Metropolitana en contra del comediante Russell Brand, denunciado por serie de delitos sexuales en contra de mujeres en Londres y otros lugares del país.

Estos nuevos casos, consigna BBC News, salen a la luz tras las denuncias que se conocieron a través de medios de comunicación el pasado 16 de septiembre.

Son acusaciones de delitos sexuales “no recientes”, señala el medio que se comunicó con la policía local, la que enfatizó que hasta el momento no se ha registrado una detención.

Denuncias contra el cómico Russell Brand

Las denuncias son el resultado de una investigación conjunta que realizó Sunday Times, The Times y Dispatches, de Channel 4, donde cuatro mujeres acusaron a Bran de agresiones sexuales y violación.

Lee también...

Por su parte, el actor se defendió a través de redes sociales y aseguró que las relaciones siempre fueron consentidas.

Entre las víctimas hay una mujer que denunció que tenía 16 cuando ocurrieron los hechos, mientras que el actor tenía más de 30.

El comisario Andy Furphy, de la Brigada Central de Delincuencia Especializada de la Policía Metropolitana, animó a “cualquiera que crea que puede haber sido víctima de un delito sexual, no importa cuánto tiempo haya pasado, a que se ponga en contacto con nosotros”, señala BBC News.

El funcionario policial agregó que “Entendemos que puede parecer un paso difícil de dar y quiero asegurar que tenemos un equipo de agentes especializados disponibles para asesorar y apoyar”.

Actor se defiende

Tras la publicación, el actor salió nuevamente a hablar del tema y afirmó que “me resulta difícil ser objetivo dado los acontecimientos de la última semana, pero eso es lo que debemos intentar hacer”.

También agradeció el apoyo de sus seguidores y que cuestionaran la información que se les presentó.

Finalmente, no habló directamente de las acusaciones que se presentan en el documental, sin embargo, lo describió como “corrupción y censura de los medios de comunicación” y “connivencia (acuerdo) entre el Estado y las empresas”.