Una empresa danesa decidió cambiar el nombre de su palito helado “Eskimo” (esquimal) porque evoca en los inuitas y otros pueblos del Ártico “un pasado de humillación y trato injusto”, iniciativa bien acogida por una diputada de Groenlandia.

“Después de una cuidadosa reflexión, decidimos darle un nombre más apropiado”, escribe la marca Hansens Is en su página Facebook, en un momento en que “se multiplican los debates públicos sobre (…) las desigualdades con respecto a las minorías y a los pueblos indígenas”.

La empresa explicó que, inicialmente, no tenía pensado renunciar al término, rechazado por los cerca de 140.000 habitantes autóctonos del Ártico.

Aaja Chemnitz Larsen, una de las dos diputadas que representan a Groenlandia en el parlamento danés, acogió con satisfacción la decisión, recordando que el término significa “devorador de carne cruda”, aunque la etimología de la palabra es aún objeto de debate entre lingüistas.

Por el contrario Premier Is, otro fabricante de helados, declaró que tiene la intención de conservar la denominación “Kaempe Eskimo” (“esquimal gigante”) para uno de sus productos.

Colonia danesa desde el siglo XVIII hasta 1953, Groenlandia es, desde 1979, un territorio autónomo de Dinamarca, con una población de unos 55.000 habitantes, en su mayoría inuitas.