“Los errores sirven mucho para enriquecerse”. Eso ha sacado como aprendizaje Javiera Mena de su fallida actuación con Alejandro Sanz la noche del miércoles en el Festival de Viña del Mar, cuando olvidó la letra y perdió el tono de la canción Corazón partío.
Más consciente de todo lo ocurrido, la cantante nacional no se echa a morir por lo ocurrido y sólo lecciones ha sacado. Así lo dijo en una entrevista con Intrusos de La Red, donde aclaró por qué dijo que no ensayó.
“Tuvimos un momento de hacerle una pasada a la canción Corazón partío y ese fue el único momento. No fue un ensayo, fue una prueba de sonido”, explicó.
En su conversación con el programa de espectáculos, Mena reconoció que “titubeó” al cantar la canción, pero luego consiguió afirmarse. “Alejandro me contuvo. Estar al lado de él, yo creo cualquier mujer se pone nerviosa, tiene una mirada muy potente”, relató.
Agencia UNO
“Son cosas que pasan, los errores sirven para enriquecerse y a mí me ha servido mucho esta oprtunidad como para, primero conocerlo, y también para aprender más sobre música flamenca que no es mi estilo. Pero bueno, me tiré, lo hice, me salió así y bueno, así es la vida”, dijo más relajada.
“Las redes sociales no son el monstruo”
Consultada si le jugaría en contra las varias críticas recibidas en redes sociales para su show del sábado, la cantante lo descartó de plano. “Las redes sociales no son el monstruo. Yo cuando estuve en la Quinta Vergara la gente me trató súper bien, me aplaudieron un montón”, indicó.
En la misma línea, aseguró que Twitter o Facebook “son otras cosas, responden a egos de distintas personas que están hablando y es diferente. También mucha gente me dio su apoyo en redes sociales, igual que Alejandro”.
“Pienso que al contrario, esto me sirve para que la gente esté más atenta a mi show del que estoy 100% segura, 100% ensayado y con muchas ganas de hacerlo”, complementó.
Para la intérprete de Luz de piedra de Luna, las críticas no son algo que le molesten. “Está bien que la gente se exprese, también como jurado nos han pifiado un poco porque no les ha gustado mucho nuestra calificación (en las competencias), pero es parte de ser un país de libre expresión y eso está bueno”, concluyó.
