La titularidad sindical, adecuaciones necesarias y negociación interempresas -puntos que esperan sean modificados por parte de los senadores de la Democracia Cristiana y miembros de la bancada pro PYME-, volverían a retrasar el envío de la reforma laboral para después de marzo.

A un mes que comience nuevamente a ser tramitada, el proyecto sigue generando fuertes divisiones entre los parlamentarios de la Nueva Mayoría. Al respecto, el ministro del Interior, Jorge Burgos, quien dijo que debe haber acuerdo en el oficialismo.

“La importante reforma laboral está más sujeta a condición que a plazo. El plazo es un hecho futuro pero cierto. La condición es un hecho futuro pero incierto, porque es una condición -a mi juicio- que seamos capaces de ponernos de acuerdo”, manifestó

El coordinador mensual de la Nueva Mayoría, Jorge Pizarro, planteó que se debe buscar un intermedio, esperando su despacho en la mitad del próximo mes.

“Nosotros esperamos despacharlo antes del 15 de marzo con un texto que sea equilibrado y que sea justo para empleadores y trabajadores”, declaró el timonel de la DC.

El senador de la bancada Pro Pyme y quien apuntó a una modificación en los pilares de la reforma, Eugenio Tuma, abogó por acuerdos: “Generalmente las diferencias entre la Cámara Alta y la Cámara de Diputados se resuelven en comisiones mixtas. No obstante se pueden llegar a acuerdos previos extra comisión mixta, y yo espero que en el Senado tengamos ese acuerdo y que ratifique la Cámara de Diputados”.

El sub jefe de bancada de la Democracia Cristiana, Iván Flores, planteó que si se tocan los pilares que ellos implantaron, rechazarán la reforma.

La discusión de la reforma laboral se iniciará en el Senado a partir del primer martes de marzo.