El 29 de julio pasado, Pablo Ramírez, un cajero de Servipag fue quemado en Hualpén por delincuentes que intentaron robarle el dinero recaudado del día.
Actualmente, Ramírez no está trabajando dado que se encuentra 100 por ciento enfocado en su recuperación. “Lo mío fue un accidente laboral, por lo tanto yo estoy con licencia médica. Sigo perteneciendo aún a mi empresa”.
“Ha sido un proceso bastante complejo, ha sido bastante difícil seguir, salir adelante con respecto al tema de mi accidente. Siempre he dicho que físicamente es bastante más llevadero, porque uno los avances los va viendo día a día [...] lo más complejo es el tema psicológico, yo no se si en realidad uno lo supera yo creo que uno aprende a vivir con esta experiencia”.
Ramírez señaló que hay días en los que no duerme en las noches, “despierto con pesadillas, crisis de pánico, entonces igual es complicado”.
“Nosotros no hemos bajado los brazos por ende la Justicia también ha tomado cartas en el asunto, pero hay montones de casos que pasan todos los días [...] Hay mucha gente que, a lo mejor, no tuvo todo el revuelo que tuvo mi ataque, si mi familia se hubiera quedado callada, sino hubiera hecho absolutamente nada seguramente hubiese sido uno más, pero todos los días se ven ataques a personas, portonazos”.
Escucha la entrevista realizada por Scarleth Cárdenas y Patricio Cuevas en Expreso Bío Bío:
