El gobierno estadounidense aprobó la venta de municiones aire-tierra a la Fuerza Aérea de Arabia Saudita, por un valor de 1.300 millones de dólares, informó el departamento de Estado este lunes.

El Congreso debe autorizar esta transacción que se realiza en momentos en que aviones de Arabia Saudita bombardean a los rebeldes hutíes en Yemen.

Los operación contra los milicia Hutí en Yemen que lideran los saudíes ha causado controversia, debido a los frecuentes reportes de civiles abatidos en el territorio.

Pero Estados Unidos ha defendido a su aliado, que es también una pieza clave en la coalición encabezada por Washington para combatir al grupo Estado Islámico en el norte, en Irak y Siria.

La Agencia de Cooperación en Seguridad y Defensa (DSCA) dijo que el arsenal de la fuerza aérea saudí es reducido, “debido al alto ritmo operacional en múltiples operaciones contra el terrorismo”.

La venta incluye 5.200 bombas guiadas con láser Paveway II en sus modelos GBU-10 y GBU-12, además de 1.100 en su versión más moderna, los GBU-24 Paveway III de largo alcance.

También hay 12.00 bombas de propósito general con un peso de hasta 900 kilos y 1.500 destructores de búnkers, the BLU-109. Ambas municiones son diseñadas para destruir estructuras de concreto.

Los saudíes también recibirán miles de kits para convertir municiones corrientes en bombas inteligentes guiadas por satélite.

“La venta propuesta aumenta la capacidad de Arabia Saudita de enfrentar actuales y futuras amenazas de potenciales adversarios durante operaciones de combate”, dijo la DSCA.