Tras una intensa negociación y la incertidumbre por contar con la cantidad de votos suficientes, este miércoles Jorge Abbott fue ratificado por el Senado para convertirse en el tercer fiscal nacional en la historia del Ministerio Público chileno.

El proceso no estuvo exento de polémicas, luego de las críticas por supuestas presiones de carácter político para establecer un candidato y de la decisión adoptada por la presidenta Michelle Bachelet de nominar al actual director ejecutivo de la Fiscalía Nacional para el cargo.

Lo anterior contravenía los consensos que apuntaban a José Morales -actual fiscal de la Unidad de Delitos de Alta Complejidad- como el sucesor de Sabas Chahuán.

Finalmente Abbott logró la venia de los parlamentarios de la Cámara Alta, quienes le dieron su apoyo transversal para ocupar la cabeza del Ministerio Público por ocho años.

La decisión no cayó bien a todos. El diputado del Partido Comunista Hugo Gutiérrez, de hecho, acusó a Jorge Abbott de ser un “cómplice pasivo de la dictadura”, difundiendo en su cuenta de Twitter un inserto del diario El Mercurio publicado el 30 de septiembre de 1988, titulado “Abogados por el Sí”.

En la publicación se aprecia un listado de profesionales -incluido el nuevo fiscal nacional- que supuestamente apoyaba la continuidad del dictador Augusto Pinochet a la cabeza del Gobierno.

Sin embargo, también en la red social del pajarito azul, la Fiscalía aprovechó de responder al parlamentario, esta vez con una imagen de una carta al director enviada al Decano por el mismo Abbott y que fue publicada tres días después del polémico inserto.

“Desmiento haber firmado dicho documento. Puesto en la necesidad de manifestar públicamente mi opción en el próximo plebiscito, ella será por la opción ‘No’”, reza la misiva.