La bolsa de Shanghai cerró con una caída de 1,27%, pese al recorte de las tasas de interés en China, que no logró disipar la inquietud de los inversores y frenar la tendencia a la baja de la plaza, que acumula así tres jornadas con pérdidas.

El índice principal perdió 37,68 puntos, hasta 2.927,29 puntos, terminando en repliegue tras una jornada en la que el índice registró fuertes fluctuaciones. El lunes la plaza había perdido 8,5% y el martes 7,63%.

El parqué registró mucha volatilidad durante la jornada, con oscilaciones que llevaron al mercado a perder cerca de 3,05% al inicio de los intercambios, pare luego recuperarse y llegar a tener ganancias del 4%, antes de una violenta caída previa al cierre.

Pese a que el Banco Central de China anunció el martes un recorte de las tasas de interés de referencia y rebajó el nivel de reservas obligatorias para los bancos, el mercado no logró reafirmarse.

“Las fluctuaciones que alternaron ganancias y pérdidas sugieren que los inversores no saben todavía cómo interpretar estos anuncios”, dijo a la agencia Bloomberg News Bernard Aw, analista de IG Asia.

Las acciones chinas han perdido cerca del 40% de su valor desde mediados de junio, lo que llevó al gobierno a intervenir para frenar las pérdidas, comprando títulos pero también obligando a los grandes inversores a mantener sus posiciones.

“El sentimiento predominante entre los inversores es vender, sin importar lo que haga el gobierno”, explicó a Bloomberg Ronald Wan, presidente del grupo Partners Capital International en Hong Kong. “El mercado va a seguir bajo presión durante algún tiempo”, afirmó.