Las investigaciones señalan que entre un 3% y un 7% de los escolares presenta déficit atencional. Un estudio de alumnos de Psicología de la Universidad del Pacífico determinó que pintando Mandalas, los estudiantes diagnosticados con SDA logran focalizar la atención, disminuyendo la mayor parte de las conductas propias de su diagnóstico.

“Meditación con mandalas en estudiantes de 6° básico diagnosticados con SDA” es el nombre de la investigación de María José Cuéllar, María Francisca González y Camila Silva, estudiantes de Psicología Visión Humanista Transpersonal de la Universidad del Pacífico, realizada en el contexto del Primer Concurso de Proyectos de Investigación de Estudiantes de Psicología (PIEP) 2014, que concluyó con un artículo que se encuentra publicado en la revista académica Visión Posible.

El estudio se realizó en un colegio particular de la Región Metropolitana con estudiantes diagnosticados con el Síndrome de Déficit Atencional (SDA), donde se utilizó la técnica de Meditación con Mandalas. “Esta investigación adoptó una metodología cualitativa para abordar dicha problemática, ya que se quiso observar la evolución de los comportamientos dentro de la sala de clases en un período de 2 meses, intentando reconstruir su realidad a través del método fenomenológico y el marco interpretativo de la fenomenología, para llegar finalmente a la experiencia de dichos estudiantes en relación a la actividad de pintar Mandalas dentro de su horario habitual de clases”, se relata en la investigación.

El principal aporte refiere que la Meditación con Mandalas en estudiantes diagnosticados con SDA contribuye significativamente a que los estudiantes puedan concentrarse y focalizar su atención en dicha actividad, disminuyendo la mayor parte de las conductas propias del diagnóstico.

Parte del foco del estudio es avanzar en la evidencia científica de la contribución de ciertas disciplinas y herramientas terapéuticas que utiliza la Psicología Humanista Transpersonal, tal como es la meditación.

“En particular, nos interesó estudiar el nivel de impacto que podría tener la aplicación de una técnica meditativa en estudiantes que presentaban dificultades en sus niveles de atención y concentración, y que han sido diagnosticados con el Síndrome de Déficit Atencional. Considerando que este diagnóstico se ha incrementado de modo importante durante los últimos años, nos preocupa poder aportar conocimiento que permita promover una mirada más amplia y estrategias novedosas que puedan potenciar en dichos estudiantes una mejor adaptación a las exigencias de la sala de clases”, señalan en la investigación las jóvenes estudiantes de Psicología de la Universidad del Pacífico.

Sobre el estudio

La actividad de pintar Mandalas realizada durante 2 meses, dos veces a la semana en horarios normales de clases, a las 8:00 y a las 15:00 horas, incluyó un ejercicio de responder luego sobre qué fue lo que les gustó y les disgustó, qué querían expresar con el Mandala y ponerle título.

Entre los principales resultados, se observó que mientras se realizaba la actividad, los estudiantes se concentraban y estaban en silencio. Además, hubo indicadores en relación al autoconocimiento, en donde los alumnos expresaron sentir relajo, diversión, comodidad, concentración y felicidad. Asimismo, hay referencias a que pintar mandalas los ayudó a expresar mejor sus sentimientos y necesidades.

“En general, durante todo el proceso investigativo se pudo ver que lo vivenciado por los estudiantes fue agradable para ellos, un proceso de autoconocimiento, de lograr concentrarse, expresar sentimientos y expresarse a través del arte y sus propias creaciones”, se indica en el estudio de las alumnas de Psicología Visión Humanista Transpersonal de la Universidad del Pacífico.