Dos funcionarios de Gobierno aparecen involucrados en la creación de correos electrónicos utilizados para denunciar un posible espionaje informático en la Intendencia de La Araucanía.
El caso se conoció públicamente el 25 de noviembre del año pasado, pero su origen se remonta al 17 de octubre del 2014. Ese día, con minutos de diferencia, se crearon dos correos electrónicos que tienen a su vez un mismo correo de recuperación de clave. El IP es el mismo y corresponde a un computador ubicado en la casa, en el sector Fundo El Carmen, de una secretaria de la Subsecretaría de Desarrollo Regional que trabaja en el quinto piso de la Intendencia.
En los correos hacen comentarios dos supuestos amigos. Curiosamente uno de los nombres coincide con el del presidente de una Asociación de Funcionarios que fue creada durante el Gobierno de Sebastián Piñera y que ha tenido dificultades para relacionarse con las nuevas autoridades. Incluso, en la conversación se dan otros nombres, también de funcionarios de la misma asociación.
Una copia de aquellos mails fueron dejados en un sobre cerrado sobre el escritorio de una de las secretarias de Marcelo García, jefe de gabinete del intendente. En los correos se habla de cómo buscar información para perjudicar a Francisco Huenchumilla. Esa supuesta conversación se adjuntó en la denuncia por un posible espionaje informático que se entregó en el Ministerio Público.
Las pericias de la Brigada del Cibercrimen de la PDI hasta ahora han logrado precisar que los correos fueron creados en un computador de la casa de la funcionaria pública, Verónica Zenteno. Y quien usó las cuentas fue su esposo, Roberto Palma, quien está contratado desde el 2 de enero de este año en la Agencia de Desarrollo Regional.
Radio Bío Bío le preguntó a Palma con qué objetivo creó las cuentas y si es el autor de los mensajes. Él reconoció que creó los dos correos y dijo que tenía la intención de escribir un blog o un libro y que por eso se escribía y respondía él mismo. Agregó que lo hizo porque tenía habilidades literarias.
Cuando se le consultó por qué utilizaba nombres de funcionarios de la Intendencia y los vinculaba a la búsqueda de información que pudiera perjudicar a Huenchumilla, señaló que se trató sólo de una coincidencia.
La Fiscalía en su momento solicitó las grabaciones de las cámaras de seguridad del edificio público para saber quién dejó el sobre con los correos a metros de la oficina de Huenchumila y su jefe de gabinete, pero los responsables del soporte técnico respondieron que no había imágenes porque cada 25 días se eliminan los registros y en la Intendencia, pese a la gravedad del caso, tampoco nadie revisó los videos o solicitó copias.
Mario Fuentes, uno de los funcionarios aludidos como supuesto involucrados en las acciones para buscar información y perjudicar al intendente, presentó una denuncia en la Fiscalía para que se investigue el caso y se determine quién está detrás de los correos con los cuales se buscaba perjudicarlo. Quien lo representa es el abogado Francisco Ljubetic, ex fiscal regional en La Araucanía.
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