El vicepresidente de la recientemente proclamada directiva de la Democracia Cristiana, Fuad Chahín, puso en duda que asuma su cargo ante la falta de una aclaración por parte del nuevo presidente de la tienda, Jorge Pizarro, respecto del vínculo de uno de sus hijos con la empresa Soquimich. La sala electoral del Tribunal Supremo de la Democracia Cristiana proclamó a la lista encabezada por el senador, y para el lunes está fijado el cambio de mando de la mesa.
Cuarenta y ocho horas se tomará el nuevo primer vicepresidente de la falange, Fuad Chahín, para resolver si asume o no su cargo junto al presidente Jorge Pizarro, quien -a su juicio- debió realizar un gesto político y aclarar, en esa condición, la vinculación de su hijo Sebastián Pizarro con Soquimich a través de su empresa Ventus Consulting.
El diputado Chahín dijo no compartir que el senador asuma el timón de la Democracia Cristiana sin despejar las dudas.
El diputado René Saffirio, en tanto, consideró que la decisión más lógica es que en un escenario político complejo para el país el senador Pizarro aclare la situación antes del lunes, día en que asumirá oficialmente su directiva.
El parlamentario emplazó al nuevo timonel que no le imponga a la DC una carga ética de la que va a ser muy difícil desprenderse.
El nuevo dirigente falangista, Jorge Pizarro, dijo valorar la diversidad de opiniones y admitió desconocer la decisión del diputado Chahín de reflexionar sobre si asumir o no su cargo en las actuales condiciones.
Pizarro, además, manifestó que espera que el tema de su hijo se resuelva de la mejor forma posible y consideró que estos temas debieran tratarse en las instancias que corresponden, al interior del partido.
El lunes el Tribunal Supremo ratificó la votación a nivel nacional y proclamó a la nueva directiva. El cambio de mando, en todo caso, se realizará el lunes 27 en el Consejo Nacional, horas después de que Sebastián Pizarro, hijo del senador, declare por el caso SQM ante la Fiscalía Nacional.