Una defensa a la batería de medidas que pretende implementar el Ejecutivo en materia laboral realizó el subsecretario del Trabajo, Francisco Díaz, quien respondió a las críticas que han surgido desde la oposición en torno a esta reforma.

En conversación con Radio Bío Bío, Díaz subrayó que la reforma se debe discutir “con ánimo constructivo, con ánimo de llegar a acuerdos y no con ánimo peyorativo”, esto último en relación a los emplazamientos de personeros de la oposición que afirman que la iniciativa de proyectos apunta más hacia el ámbito sindical que al laboral.

Dentro de las críticas destaca la realizada por la otrora ministra del Trabajo y ex candidata presidencial de la Alianza Evelyn Matthei, quien sostuvo que “es absolutamente obvio que ésta no es una reforma pro empleo, o pro trabajadores”.

Al respecto, el subsecretario afirmó que “ésta no es una reforma contra nadie, ésta es una reforma para todos los ciudadanos, todos los trabajadores y la clase media“, invitando a Matthei a “informarse respecto de la agenda completa que tiene el Gobierno en materia de trabajo”.

El proyecto de ley, agregó, “se enmarca en una agenda de trabajo de calidad, en el cual hay medidas potentes para la generación de empleos, especialmente en materia de jóvenes y mujeres”, a lo que se suma el refuerzo de la negociación colectiva en lo que respecta a definición de jornadas de trabajo, horas extraordinarias y otro elementos que, a su juicio, “van a dinamizar y van a permitir una mejor adaptación de las empresas a los procesos productivos”.

El tono peyorativo hacia la reforma sindical es algo que nosotros rechazamos. Detrás del dirigente sindical hay personas que solo buscan satisfacer, luchar y defender derechos de los trabajadores, proteger a las personas y hacer un esfuerzo de trabajo colectivo. No nos gusta ese tono peyorativo hacia lo sindical que se denota de la expresión de una serie de personeros que han estado hablando en estos días”, señaló.

Entre los desafíos para el Gobierno, Díaz dijo que la empleabilidad de jóvenes y de mujeres es uno de los aspectos que más preocupa a la actual administración, agregando que existe un “déficit gigantesco” en dicho ámbito que pretenden solventar en parte con el Programa de Formación en Oficios, cubriendo a cerca de 450.000 personas.

Finalmente destacó que el retiro del proyecto de sala cuna universal presentado en la administración de Sebastián Piñera respondió a insuficiencias como el modo de financiamiento que se basaba en la utilización de las cotizaciones del seguro de cesantía. “Nosotros queremos crear un derecho universal financiado por todos que sea algo universal y por tanto toda la sociedad contribuya a aquello”, aseguró.