El movimiento islamista Hamas e Israel alcanzaron este martes un acuerdo de alto al fuego “ilimitado” en la Franja de Gaza que entrará en vigor a las 16:00 GMT (12:00 horas de Chile), antes del cual un israelí murió por un obús disparado desde el enclave palestino.
El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abas, había anunciado este alto el fuego permanente al cumplirse 50 días de una guerra que dejó más de 2.000 muertos en la Franja de Gaza.
“Anunciamos el acuerdo de los negociadores palestinos con el llamamiento de Egipto para una tregua duradera e inclusiva”, dijo Abas en un mensaje televisado al inicio de un encuentro en Cisjordania.
Egipto, mediador en las negociaciones indirectas entre ambas partes celebradas desde el inicio del conflicto, el 8 de julio, confirmó que el “acuerdo de alto al fuego” debe “entrar en vigor a las 16H00 GMT”.
“Egipto anunció que palestinos e israelíes cerraron un alto el fuego, que entrará en vigor a las 19:00 locales (16:00 GMT)”, indicó la agencia estatal MENA, que no precisó la duración de la tregua.
Poco después del anuncio egipcio, una fuente gubernamental israelí indicó que Israel aceptó una alto el fuego “ilimitado” en Gaza.
El movimiento islamista Hamas, en el control en la Franja de Gaza, reivindicó una “victoria”, y un alto responsable palestino afirmó que el acuerdo prevé “el levantamiento del bloqueo en la Franja de Gaza” que Israel impone desde hace ocho años, la principal exigencia de los palestinos desde el inicio de las negociaciones.
Con la entrada en vigor de este acuerdo se pondrá fin a 50 días de violencia y varias semanas de negociaciones interrumpidas por treguas temporales a menudo rotas. El último alto el fuego terminó hace una semana al cabo de nueve días de la forma más violenta: murieron 119 palestinos y un niño israelí.
Desde el inicio del conflicto murieron en total 2.138 palestinos y 68 personas en Israel.
Pero sobre el terreno, justo después de realizarse este anuncio continuaban los enfrentamientos.
Un israelí murió por un obús de mortero lanzado desde la Franja de Gaza en dirección a la región de Eshkol, limítrofe con el territorio palestino, y otras dos personas resultaron gravemente heridas, según fuentes de seguridad.
Los drones israelíes también continuaban sus mortíferos ataques, que mataron a siete palestinos.
“Inaceptable venganza”
La aviación israelí ha dirigido sus ataques en los últimos tres días a nuevos objetivos en el pequeño enclave palestino: los edificios más altos de Gaza.
Este martes dos edificios de 14 y 16 pisos -con varios apartamentos residenciales habitados por numerosas familias- fueron reducidos a escombros tras haber sido alcanzados por más de una decena de misiles.
En la madrugada, 25 personas resultaron heridas, según los servicios de socorro palestinos, cuando el primer edificio de 16 pisos se derrumbó bajo las bombas.
El ejército israelí había previamente llamado a los residentes a dejar “inmediatamente” el edificio, “ya que iba a bombardearlo”, según contó un residente del barrio.
“Todos corrieron a la calle para protegerse” relata a la AFP. Las bombas destruyeron 60 apartamentos, un centro comercial y decenas de tiendas de esta torre.
Un poco más tarde, otro edificio que alberga la sede de la radio del Frente Popular de Liberación de Palestina (FPLP), y el principal movimiento de izquierda, Sawt al Shaab (La voz del pueblo, en árabe) fue en gran parte destruido. Este bombardeo dejó 15 heridos.
El movimiento islamista Hamas, que controla la Franja de Gaza, denunció estas destrucciones, y las calificó de “crimen de guerra y una inaceptable venganza de Israel contra los gazatíes para intimidarlos”.
El brazo armado de Hamas, las Brigadas Ezedin al Qassam, afirmó haber replicado con “un disparo contra Haifa (norte de Israel) y cuatro contra Tel-Aviv”. Estos lanzamientos de cohetes no alcanzaron estas ciudades, según el ejército israelí. que sin embargo dio cuenta de la caída de 18 cohetes en localidades cercanas a Gaza.
Por otra parte, en el norte de la Cisjordania ocupada el Ejército israelí detuvo a 13 miembros del FPLP.