Unos 7.000 simpatizantes del movimiento #Yosoy132 se concentraron este jueves en inmediaciones de la emisora Televisa en Ciudad de México para denunciar la supuesta campaña de información preelectoral que la cadena habría realizado a favor del Partido Revolucionario Institucional (PRI), cuyo candidato Enrique Peña Nieto ganó los comicios.

Un periodista de la AFP constató la presencia de los manifestantes en las inmediaciones de Televisa alrededor de las 22:00 (23:00 hora chilena), donde desde horas antes la policía desplegó un fuerte dispositivo de seguridad para evitar desórdenes.

Los manifestantes pretenden permanecer por 24 horas en las cercanías de la televisora, impedir la entrada del personal y protestar contra ella, en coincidencia con la tranmisión de la inauguración de los Juegos Olímpicos de Londres 2012.

La elección presidencial del pasado 1 de julio fue ganada con 38,2% de los sufragios por Peña Nieto, candidato del opositor PRI, partido que gobernó México de 1929 a 2000, según los datos oficiales.

Los manifestantes, que llevaban pancartas en las que se leía “No a la imposición”, dieron lectura a un manifiesto en momentos en que la televisora daba comienzo a la emisión de su noticiero estelar.

“Exigimos la democratización de la propiedad de los medios de comunicación. Es indispensable si queremos una real democracia. Vamos a convocar asambleas populares, barriales y comunales para resisitirnos a la imposición presidencial”, rezaba la proclama leída en la concentración.

El candidato de la izquierda, Andrés Manuel López Obrador, segundo en los comicios con 31,6% de los votos, reclamó que se declare inválida la elección con el argumento de que el PRI compró unos cinco millones de votos con recursos públicos e incluso ilícitos.

El Tribunal Electoral debe resolver las impugnaciones antes del 6 de septiembre.

El movimiento #Yosoy132, que se declara apartidista aunque muchos de sus seguidores simpatizan con López Obrador, considera que los medios de comunicación, principalmente Televisa, impulsaron la imagen de Peña Nieto desde años atrás para favorecer el regreso del PRI al gobierno, lo que consideran un retroceso democrático.