En completo silencio y con la mirada perdida, el sospechoso de haber acribillado a 12 personas en un cine del estado de Colorado, Estados Unidos, hizo su primera comparecencia ante la Justicia.

James Holmes llevaba uniforme naranja y el pelo pintado anaranjado, durante la audiencia ante un juez de Denver, lugar donde ocurrió la masacre. La audiencia duró menos de 10 minutos y tuvo entre el público a varios familiares de las víctimas.

Holmes, de 24 años, es acusado de matar a 12 personas y herir a 58 en un cine donde se estrenaba la última entrega de Batman.

Los fiscales pedirían esta semana la pena de muerte, pero deben consultar a las familias de las víctimas si están dispuestas a proseguir con un caso que se puede extender en el tiempo.