El fichaje del sueco Zlatan Ibrahimovic por el PSG y, sobre todo, el sueldo que va a recibir el jugador, unos 14 millones de euros anuales netos, ha provocado una polémica política en Francia, donde se ha calificado de “indecente” o “astronómico” el dinero que recibirá el futbolista.

El goleador, de 30 años, fue presentado el miércoles por el equipo de la capital como si fuese una estrella del rock, pero si el PSG se ha podido hacer con los servicios de ‘Ibra’ ha sido, sobre todo, gracias al capital catarí que controla desde hace un año el equipo parisino.

En un país en crisis, que roza la recesión y en el que la presión fiscal aumenta para reducir el déficit público, varios ministros y representantes de la clase política francesa han reaccionado airadamente contra las cifras económicas del traspaso del futbolista.

“Estas cifras no son impresionantes, son indecentes”, declaró el ministro de Presupuesto Jerome Cahuzac en la emisora de radio Europe 1.

“Son indecentes en un momento en el que el mundo entero debe hacer esfuerzos, conoce las consecuencias terribles de una crisis que, por otro lado, la lógica financiera del mundo de la economía ha provocado, esta misma lógica financiera parece adueñarse cada vez más del fútbol”, denunció.

Su compañera en el gobierno socialista Valerie Fourneyron, titular de Deportes, calificó las cantidades publicadas como “astronómicas, irracionales” y criticó “la ausencia de toda regulación” en el fútbol, “con déficits que se acumulan en el ámbito europeo”.

Para el nuevo gobierno socialista, cuyo presidente François Hollande anunció durante la campaña una tasa del 75% de todos los ingresos superiores al millón de euros, es impensable que Ibrahimovic quede al margen del nuevo impuesto, que podría aprobarse en otoño.

“No hay motivo por el que los deportistas deban escapar a este nuevo tramo del impuesto excepcional del 75%”, declaró la portavoz del gobierno, Najat Vallaud Belkace, el miércoles tras la reunión del consejo de ministros.

Ubicado en el ala más izquierdista del Partido Socialista, el ministro delegado de la Economía Solidaria, Benoit Hamon, sorprendió a sus propios compañeros al destacar los beneficios que el fichaje del jugador sueco tendrá para el fisco francés.

“Esto me satisface, estoy contento de que pague sus impuestos en Francia”, declaró Hamon.

Según cálculos de algunos expertos consultados por la AFP, teniendo en cuenta que se habla de que Ibrahimovic cobrará alrededor de 14 millones de euros netos anuales (17 millones de dólares), el PSG, que deberá hacer frente a otros pagos al fisco como empleador, podría tener que desembolsar más de 100 millones de euros cada año (más de 122 millones de dólares) para satisfacer las pretensiones del futbolista.

Ibrahimovic, no obstante, podría beneficiarse de algunas ventajas fiscales por su condición de residente temporal en Francia.

Estas cifras no han sido criticadas sólo por personalidades de la izquierda. La exministra de derechas Roselyne Bachelot aseguró que los emolumentos que va a percibir Zlatan Ibrahimovic le provocan “indignación, casi asco”.

Hasta Hollande habló recientemente del dinero que mueve el fútbol, sin referirse directamente al PSG o a Ibrahimovic, y destacó que “hay equipos que llegan a ganar, incluido en el deporte profesional, sin tener necesariamente remuneraciones muy importantes”.

El presidente del PSG, el catarí Nasser al Khalaifi, se limitó a decir que Qatar Sports Investments (QSI), proprietaria del club, respeta “las leyes francesas”, al ser interrogado el miércoles sobre cómo van a combinar le salario del jugador con la fiscalidad francesa.

“Tal como ya hemos dicho, respetamos las leyes francesas. La firma de Ibrahimovic es muy positiva para el PSG y para el fútbol francés”, insistió el catarí.