Los cuestionamientos a la forma en que el Servicio de Salud de Reloncaví entregó a una empresa privada las operaciones aeromédicas en la region de Los Lagos, dejaron al descubierto una investigación contra un Teniente Coronel en retiro del Ejército.

Se trata de Pedro Espinoza Silva, hijo del Brigadier Pedro Espinoza, quien es investigado por una posible adulteración de documentos para obtener la licencia comercial.

El caso comenzó a ser investigado el 9 de marzo, cuando el diputado socialista Fidel Espinoza denunció ante la Contraloría que el Servicio de Salud Reloncavi había cerrado un acuerdo comercial, sin licitación, con la empresa Inaer para realizar las evacuaciones aeromédicas en la región de Los Lagos. Se le pagan 65 UF por hora de vuelo, poco más de un millón 450 mil pesos.

La investigación sigue abierta, pero han surgido más cuestionamientos. Por ejemplo que la empresa Inaer contrate a médicos y paramédicos del Hospital Base de Puerto Montt, entre estos al director del SAMU Alan Bazan.

La subdirectora médica y directora subrogante del Servicio de Salud, Jacqueline Rocco, confirmó que Bazan está contratado por la empresa. Ademas aclaró que por ahora no se pagará nada mientras no se pronuncie la Contraloría.

Hasta antes del primero de enero, fecha en la que comenzo a operar el acuerdo comercial, las evacuaciones las realizaba la Fuerza Aérea. El general de Brigada Juan Gonzalez Silva, comandante de la Tercera Brigada Aérea con base en Puerto Montt, dijo que ellos siempre estan disponibles para este tipo de operaciones, sin cobrar por ello.

En medio de la investigación surgio otro dato; un piloto de Inaer habría adulterado documentos para poder volar en forma comercial. Se trata del teniente coronel en retiro del Ejercito Pedro Espinoza, situación que fue confirmada por el diputado Fidel Espinoza.

El Servicio de Salud Reloncaví, después de los cuestionamientos, en junio llamó a licitación. Al proceso se presentaron dos empresas, Inaer y AeroRescate. Ahora un equipo técnico debe resolver que empresa se quedara con el contrato.

Revisa el documento enviado por la empresa Inaer a la Fuerza Aérea en enero de 2012 pidiendo “coordinar la participación de ambos en los servicios que se requiera prestar a instituciones públicas”.