Al cumplirse 100 años de la partida del maestro Pedro Lira, considerado “el padre de la pintura chilena”, la Corporación Cultural de Las Condes, le rinde homenaje con una exposición retrospectiva titulada “Pedro Lira. Pintura eterna”.

La gran muestra –que ocupa todas las salas del segundo piso de la corporación- está abierta al público hasta el 15 de julio e incluye importantes obras del artista -algunas de ellas nunca antes exhibidas al público- que provienen del Museo Nacional de Bellas Artes, la Pinacoteca de Concepción, museos, bancos e instituciones, y colecciones particulares

No es primera vez que la Corporación Cultural de Las Condes realiza un homenaje a Pedro Lira: en 1992, hace veinte años, se realizó una gran muestra antológica que batió todos los récords de público de la época, con largas filas de gente a la entrada de las salas y de la casona.

“La personalidad de Pedro Lira Rencoret se agiganta con el paso del tiempo y alcanza niveles epopéyicos si pensamos en el momento que le tocó actuar –expresa Ricardo Bindis en el texto de la exposición- En él se funden condiciones de orador, teórico, profesor y creador, que muy difícilmente pueden repetirse en las bellas artes nacionales. Su portentosa actividad eclipsó a todos los que estaban a su lado, que admiraban a este caudillo tan determinante en nuestro breve historial plástico. Editó libros de arte, fundó sociedades, activó la construcción de nuestro primer museo, reglamentó el Salón Anual de los artistas, estructuró programas docentes y realizó cientos de cuadros, en una tarea cultural sin precedentes”.

Pedro Lira (1845-1912) es considerado entre los grandes maestros de la pintura chilena y el más importante exponente de la transición entre el siglo XIX y XX. A pesar de su apego a los cánones de la pintura clásica académica, logró imprimir rasgos distintivos en sus obras, abordando todo tipo de temas, históricos, paisajes, retratos, desnudos, y en forma especial, escenas de la vida cotidiana. Éstas últimas revelan su especial preocupación por la soltura de la pincelada, el dinamismo en la composición, el uso del color y, en forma especial, su predilección por retratar escenas cotidianas de las clases más humildes, aspecto que inspiraría a muchos de sus discípulos, que más tarde conformaron la Generación del Trece.

La entrada a la muestra es liberada, y se exhibirá de martes a domingo, de 10:30 a 19:00 horas.