El juez brasileño que ordenó el arresto de un líder del juego clandestino vinculado presuntamente con gobernadores y congresistas denunció amenazas de muerte y pidió su desvinculación del caso, en una carta divulgada por la prensa este martes.

El juez Paulo Moreira Lima alegó falta de condiciones para continuar al frente del proceso contra Carlos Augusto Ramos, conocido como Carlinhos Cachoeira, detenido en febrero y cuyas relaciones con políticos amenazan con desatar un escándalo de proporciones antes de los comicios municipales de octubre.

Lima, que cuenta con un severo esquema de seguridad, aseguró que su familia fue abordada por policías que lanzaron una “velada amenaza” y que por ello decidió apartarse del caso y salir del país temporalmente, según una carta difundida por el diario O Estado de Sao Paulo.

Asimismo, dijo tener informaciones sobre asesinatos cometidos por orden de personas capturadas en el proceso contra Cachoeira.

El llamado “padrino del juego clandestino” en Brasil fue detenido el 29 de febrero por lavado de dinero y contrabando, con base en interceptaciones telefónicas realizadas por la Policía cuya legalidad es cuestionada por su defensa.

Cachoeira fue relacionado con seis diputados, cuatro gobernadores y un senador, tanto de oposición como aliados del gobierno, y con la empresa Delta, hasta hace poco la constructora más contratada por el Ejecutivo.

El caso también está siendo investigado por el Congreso, y coincide con el juicio que se sigue por el mayor escándalo de corrupción contra el Partido de los Trabajadores (PT, izquierda), en el poder actualmente.

En 2005, el partido oficialista fue acusado de llevar una contabilidad paralela y de pagar sobornos a parlamentarios, lo que generó una grave crisis política que amenazó al gobierno del ex presidente Luiz Inacio Lula da Silva (2003-2010).