Cuatro soldados de la ISAF, la fuerza armada de la OTAN en Afganistán, murieron en explosiones en el sur del país, donde la rebelión es muy activa, informó este domingo la ISAF en un comunicado.

Los soldados murieron “en atentados distintos con artefactos explosivos caseros” el sábado, indicó el comunicado. Como es su costumbre, la ISAF no confirmó ni las condiciones del ataque ni la nacionalidad de los soldados.

Estas bajas hacen llegar a 269 el números de soldados de la OTAN muertos en Afganistán este año y a 3.016 desde 2001, según un conteo de la AFP efectuado a partir del portal icasualties.org.

Diez años después de la llegada de la coalición internacional, que cuenta actualmente 130.000 hombres, la insurrección anti-gubernamental, dirigida por los talibanes, mantiene una guerrilla sangrienta en Afganistán, sobre todo en el sur y el este del país.

La OTAN cuenta transferir la responsabilidad de las operaciones de seguridad a las fuerzas afganas en 2013 y de pasar hasta fines de 2014 a misiones de apoyo al ejército afgano.