La muerte de un feto en el útero materno está normalmente ligada a dificultades en el embarazo, como problemas con la placenta o parto prematuro, según dos investigaciones estadounidenses publicadas este martes y que buscan arrojar luz en las causas y riesgos de este fenómeno poco estudiado.
Hace diez años se conocía muy poco sobre las causas de la muerte fetal, un término utilizado para describir el deceso de un bebé en la semana 20 o posterior del embarazo.
Aún cuando son raros los casos, en Estados Unidos ocurren una vez de cada 160 embarazos, una tasa más alta que en otros países desarrollados.
Un par de estudios publicados en la revista científica Journal of the American Medical Association muestra que, en la mitad de las ocasiones, una o más complicaciones en el embarazo parecen ser la causas de estas muertes.
Entre las complicaciones se incluyen problemas con la placenta -que se encarga de proporcionar nutrientes y sangre para el feto y eliminar desperdicios- en 26% de los casos, según los resultados obtenidos por los investigadores de los Institutos Nacionales de Salud estadounidenses.
Las infecciones causan entre el 14 y el 19% de las muertes del feto y las anormalidades fetales y problemas con el cordón umbilical son responsables cada una del 10% de las muertes del bebé antes de nacer.
Al examinar datos de 500 mujeres embarazadas en cinco estados del país, los investigadores fueron capaces de identificar una probable causa de muerte fetal en 61% de los casos. Un tercio de ellas fueron ligadas a una o más causas.
A menudo, la investigación se vio frustrada por la falta de análisis posteriores a la muerte, dado que la mitad de las familias no autorizan el estudio debido al trauma del momento o a preocupaciones financieras.
De hecho la investigación comenzó con un número potencial de 900 mujeres a analizar, pero finalizó solo con 500, porque se centró únicamente en aquellas que habían completado un análisis post-mórtem.
“Nuestro estudio mostró que una posible causa de muerte -más del 60%- podría encontrarse a través de evaluación médica”, dijo Uma Reddy, uno de los autores del estudio.
“Una mayor disponibilidad de evaluación médica en muertes fetales, particularmente la autopsia, el examen de la placenta y el cariotipo (análisis cromosómico) proporcionaría información para entender mejor las causas de la muerte fetal”, añadió.