Los argentinos votaban este domingo para elegir presidente, en unos comicios en los que Cristina Kirchner es amplia favorita a ser reelecta por un nuevo período de cuatro años, según todas las encuestas.

Kirchner, abogada de 58 años, obtuvo 50,7% de los votos en las primarias abiertas del 14 de agosto, y en los últimos sondeos mantenía una ventaja de más de 35 puntos sobre el resto de los candidatos.

Unos 28,8 millones de argentinos están habilitados para votar en estos comicios, donde además se renueva la mitad de la Cámara de Diputados, un tercio de la del Senado y se eligen nueve gobernadores.

Las mesas de votación permanecerán abiertas hasta las 18H00 locales (21H00 GMT), y los primeros resultados oficiales se conocerán después de las 00H00 GMT.

Kirchner votó poco antes del mediodía en la ciudad de Río Gallegos (2.600 km al sur de Buenos Aires), donde se mostró emocionada al evocar la figura de su marido y antecesor, el fallecido ex presidente Néstor Kirchner (2003-2007).

“No puedo decir que es un momento de felicidad porque mentiría, tampoco de tristeza, desde donde él esté debe estar muy contento con que la gente vaya a votar y esté todo en paz y concorde”, dijo con lágrimas en los ojos.

El ministro del Interior, Florencio Randazzo, afirmó que los comicios “se desarrollan con normalidad con la totalidad de las mesas conformadas y un alto porcentaje de votantes que llegó al 35%” al término de las tres primeras horas de votación.

Más de 87.600 efectivos de las fuerzas armadas y de seguridad integran el operativo de custodia electoral, que cuenta con 12.526 locales de votación en todo el país.

Para evitar una segunda vuelta, Kirchner deberá obtener 45% de los votos o 40% y una diferencia de diez o más puntos sobre el segundo.

La justicia electoral prohíbe publicar o difundir encuestas y proyecciones sobre el resultado de la elección durante la realización de los comicios y hasta tres horas después del cierre de los centros de votación.

De confirmarse lo que vaticinan los sondeos, Kirchner, que encabeza la fórmula del Frente para la Victoria (peronista) y lleva como vicepresidente al actual ministro de Economía, Amado Boudou, será la primera mujer en ser elegida para un segundo mandato en la historia argentina.

La principal incógnita es cuál será el candidato de la oposición que obtenga el mayor caudal de votos.

Los últimos sondeos anticipaban un reñido segundo lugar entre el socialista Hermes Binner, gobernador de la provincia de Santa Fe (centro), y el candidato y diputado por la Unión Cívica Radical (socialdemócrata) Ricardo Alfonsín, hijo del fallecido ex mandatario Raúl Alfonsín (1983-89).

“Hicimos todo cuanto se pudo; la de hoy no es la primera elección difícil en la que participamos”, dijo Alfonsín luego de votar.

De su lado Binner prefirió destacar el rol institucional del Congreso al aludir que hacia allí estará puesta la energía de la oposición de confirmarse el abrumador triunfo de Kirchner que prevén los sondeos.

“El Congreso es el lugar del debate y de la formación de las leyes, un lugar sumamente importante para la república”, dijo Binner al votar.

Detrás de ellos, según las encuestas, se ubican los peronistas disidentes Alberto Rodríguez Saá y el ex presidente Eduardo Duhalde (2002-2003).

El gobierno aspira a recuperar la mayoría en la Cámara de Diputados, tras la dura derrota que sufrió en las legislativas intermedias de 2009 luego de una rebelión de los productores agrícolas contra un impuesto a las exportaciones un año antes.

Durante su campaña Kirchner hizo hincapié en la reducción de los niveles de pobreza, que hoy llega a 8,3% (2 millones de personas en las 31 principales ciudades del país).