Usuarios denuncian mala atención en hospitales públicos de Concepción. Discriminación y escasa empatía hacia los pacientes resulta ser común en estos recintos.
Nelly Rioseco tiene 53 años y es hipertensa. El 9 de agosto fue internada en el Hospital de Lota, lugar donde se le realizaría una cirugía para eliminar las várices de su pierna derecha. Sin embargo, cuando asistió al Consultorio de San Pedro para que los puntos de la herida fueran retirados, su pierna estaba completamente infectada.
El médico no halló respuesta, sólo le dijo que hiciera el reclamo al libro. La mujer le entregó la carta a la dirección el miércoles pasado y hasta ahora no responden. Nelly está desesperada, pues debe caminar con un andador ortopédico que se consiguió. Se encuentra postrada, los dolores son fuertes y la dejaron sin medicamentos. No tiene previsión ni los medios para trasladarse y asistir a los controles.
Otro paciente que denuncia mala atención por parte de un servicio público es José Araneda, quien luego de 1 año de tramitaciones, pudo conseguir una interconsulta al Hospital Regional para que pudieran tratarle un hemangioma testicular. Acompañado de su hijo del mismo nombre, asistió al recinto, no obstante, el trato recibido no fue digno, pues según la versión del hombre el médico le dijo que no valía la pena que a los 62 años se tratara. Estas palabras se las dijo sin siquiera mirarlo.
Araneda hijo señaló su angustia, ya que su padre tiene depresión y después de esto, teme que atente contra su vida.
Ambas personas piden ser escuchadas y recibir una respuesta. Temen que estos tratos se repliquen, pues es algo reiterativo en los hospitales públicos. La discriminación y la escasa empatía hacia los pacientes es lo que se denuncia.