Señalando que “aunque hace rato que el gobierno venía amenazando con la venta del 43,44% de las acciones de la empresa sanitaria Essbio que aún estaban en manos del Estado, pensamos que atendiendo al fuerte rechazo que genera esta medida, la gran pérdida que esto significa para el patrimonio nacional en materia hídrica y sobre todo por los costos económicos que esta medida terminará finalmente produciendo en los presupuestos de la familias de la región, el gobierno sería capaz de cambiar esta decisión”, el senador Alejandro Navarro reiteró su absoluta oposición a la venta de esta empresa.

El también presidente del MAS sostuvo que “ante este escenario hacemos un llamado al Presidente Sebastián Piñera para que paralice la venta de las acciones programada para este viernes. Aún estamos a tiempo de evitar los efectos negativos que esta medida va a ocasionar.

Asimismo emplazamos a los partidos de oposición, sus diputados y senadores a que se definan públicamente frente a esta decisión y no mantengan el silencio cómplice que hasta ahora muestran. Por cierto, aquellos militantes y dirigentes de la UDI y RN que quieran candidatearse en el futuro, también deberían hacerlo”.

“No es posible -prosiguió- aceptar sin decir nada que el gobierno, aprovechando las malas decisiones de los gobiernos anteriores decidiera vender este importante patrimonio, primero escudándose en la necesidad de recursos para la reconstrucción y luego añadiendo otros objetivos tales como la ampliación del Metro de Santiago, es decir, vendiendo una empresa regional estratégica para beneficio del centralismo insaciable”.

Navarro recordó que “si ya antes de que los gobiernos de Frei y Lagos abrieran la puerta a la venta de las sanitarias Essbio era una empresa absolutamente rentable, pese a ello lo sigue siendo. Así es que sólo entre 2005 y 2009 tuvo utilidades por casi 186 mil millones de pesos y entre 2000 y 2009 la Corfo recibió dividendos por más de 83 mil millones de pesos, lo que equivale a varias veces los presupuestos municipales de las comunas más pobres de la región.

Entonces para que vender una empresa con esa viabilidad económica. Hacerlo es repetir el viejo error de pan para hoy y hambre para mañana, aunque en este caso lo que habrá será sed para mañana”.