El presidente nacional de la Fenpruss, Claudio González, reprochó en Valdivia los dichos del Ministro de Salud, Jaime Mañalich, quien usó palabras soeces en una conversación con trabajadores del sector.

El timonel de los Profesionales Universitarios de Servicios de Salud indicó que el Ministro de Estado debe una disculpa a los trabajadores, asegurando que la relación con funcionarios no se debe basar con el uso de groserías o improperios.

Esto, luego que el Ministro de Salud, Jaime Mañalich –según se consigna en nuestra página web- se jactara del descuento salarial que mandató hacerles a todos los funcionarios que participaron del paro por mejoras laborales del año pasado.

La alta autoridad, recordemos, el 15 de abril, durante la realización del Congreso de corporaciones municipales, señala textual: “Si hay algo con lo cual los funcionarios municipales de la salud se van a acordar del ministro Mañalich va a ser lo siguiente: este es el hueón que nos cagó”. Lo que estaba en la ley hizo que se cumpliera. Y a mi me da mucho orgullo ser recordado de esa manera. Es mejor ser recordado así que porque hay que darle leche a las vacas”.

Ante esto, el presidente nacional de la Fenpruss señaló que espera que haya sido sólo una salida de protocolo y no que se transforme en un precedente de cómo un Ministro de Estado se relaciona con sus funcionarios.

Las declaraciones las realizó en el marco del lanzamiento oficial del organismo “Su Derecho es Mi deber” – en dependencias de la Sala Provincia de Valdivia del municipio local- que principalmente busca comprender y aceptar que la salud constituye un derecho humano fundamental de todos los chilenos, quienes no tendrían una atención de calidad por responsabilidades funcionarias y del mismo sistema, como lo manifestó la presidenta regional del gremio, Aurora Delgado

La entidad espera que en el mensaje del 21 de mayo, el presidente Sebastián Piñera anuncie cambios que –a juicio del gremio- esperan los usuarios y trabajadores de salud, como por ejemplo traspasar los fondos de Fonasa a los hospitales públicos, para que éstos no se sigan sobreendeudando, ya que los recursos serían insuficientes al atender al 80% de la población más vulnerable.