“La comunidad internacional no se va a dejar engañar por el régimen libio y va a verificar” que cumpla la resolución de la ONU, advirtió este viernes el jefe del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, tras el alto el fuego anunciado por las fuerzas gubernamentales.

“La comunidad internacional no se va a dejar engañar por el régimen libio y va a verificar con todos sus medios al alcance el cumplimiento estricto de la resolución” adoptada el jueves por la ONU, declaró Zapatero en conferencia de prensa junto al secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, tras un encuentro con él en Madrid.

Esta verificación empezará a hacerse el sábado en una cumbre en París entre la Unión Europea (UE), la Liga Arabe y la Unión Africana con la presencia del secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, y a la que también asistirá Zapatero, precisó.

El mandatario español hizo estas declaraciones momentos después que el ministro libio de Relaciones Exteriores, Musa Kusa, anunció que Libia decidió el fin de todas las operaciones militares, aunque poco después se registraron nuevos combates.

Ban reaccionó por su parte al anuncio de alto el fuego estimando “absolutamente necesario que las autoridades libias cesen inmediatamente todas las hostilidades contra la población civil”.

Y advirtió de que “los ataques armados contra civiles desarmados y pacíficos son una violación del derecho humanitario internacional y las personas que han cometido o que cometan estos crímenes serán responsables, deberán rendir cuentas y comparecerán ante la justicia”.

En Libia, el comandante rebelde Jalifa Heftir declaró que el alto el fuego anunciado por el régimen libio “no es importante” para la oposición y consideró que se trata de una mera “artimaña” de Muamar Gadafi, mientras la Unión Europea (UE) dijo que “examina los detalles” del anuncio de alto el fuego.

El régimen libio decidió el fin de la violencia tras la aprobación el jueves por parte del Consejo de Seguridad de la ONU del uso de la fuerza para detener el avance sobre los rebeldes libios de las fuerzas del coronel Muamar Gadafi.

Ban dijo al respecto que es “necesario que todos los estados miembros de Naciones Unidas cooperen estrechamente y apliquen” la resolución del Consejo de Seguridad “donde puedan, utilizando todos los medios a su disposición”.

Alemania se abstuvo en la votación de la resolución de la ONU y alegó que una intervención militar implica “riesgos y peligros considerables”.

Por su lado, la OTAN acordó este viernes “acelerar la planificación” para una eventual participación en una intervención militar internacional en Libia.