El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, dijo el viernes que el pueblo egipcio ha hablado, no aceptará nada menos que una “democracia genuina” e instó a los militares a asegurar una transición política creíble.

“El pueblo de Egipto ha hablado; su voz ha sido escuchada y Egipto nunca será el mismo”, dijo Obama en su primera reacción pública a la renuncia, este viernes, del presidente egipcio Hosni Mubarak, después de 18 días de protestas populares masivas.

“Al dimitir, el presidente Mubarak ha respondido al hambre de cambio del pueblo egipcio”, añadió Obama.

“Los egipcios han dejado claro” que no quieren nada menos que “una democracia genuina”, agregó Obama, que elogió a los militares egipcios por proteger el país.

Ahora, le toca a las fuerzas armadas garantizar una transición política “creíble a los ojos del pueblo egipcio”, dijo Obama, advirtiendo no obstante que “se avecinan días difíciles”.